Rafa Nadal volvió la semana pasada a la competición con dos partidos en el Barcelona Open, tras más de 100 días sin partidos oficiales. Esta semana, el balear continuará su preparación en el Mutua Madrid Open, en el que debutará contra un joven y poco conocido Darwin Blanch.
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El jugador estadounidense tiene 16 años y apenas ha disputado un partido ATP. Aún así, cuenta ya con algún récord en su saco, como el de haber sido el segundo jugador más joven en conseguir un punto en la clasificación ATP. Fue en febrero de 2022 en Villena, tras ganar un partido a Gerard Planelles. Tenía entonces 14 años y cinco meses, solo dos más que Nicolás Álvarez Varona, jugador que ostenta la primera plaza en este particular ranking de juventud tras sumar su punto en 2015.
Con su carrera dando sus primeros pasos, el estadounidense de padre español debutará en la arcilla de Madrid ante toda una leyenda como Rafa Nadal. No es de extreñar así su reacción al conocer su rival, publicando en sus redes sociales un selfie llevándose las manos a la cara. Un gesto quien sabe si de emoción, susto o todo junto.
Para poner aún más en contexto lo que puede significar para Blanch jugar contra Rafa hay que tener en cuenta que hay 21 años y 117 días de diferencia. Traducido al tenis, cuando el joven Darwin nació, el 28 de septiembre de 2007, Nadal era ya una estrella consolidada con varios títulos en su vitrina, entre ellos tres de sus 14 títulos de Roland Garros y una corona en Madrid, la conseguida en 2005.
Blanch, por su parte, llega como uno de los jóvenes más prometedores del circuito y atesora las semifinales en las versiones junior Roland Garros, Wimbledon y US Open en 2023, como mejores resultados. En este 2024 recibió una ‘wild card’ para disputar el Masters 1000 de Miami, aunque su periplo duró tan solo el primer partido, en el que cayó eliminado ante un experimentado Tomas Machac (6-4, 6-2).
Tenis en la sangre
Darwin Blanch nació en Deerfield Beach (Florida) pero el trabajo de su padre en una conocida empresa de bebidas azucaradas le llevó a viajar por todo el mundo. Empezó a jugar al tenis de pequeño junto a sus tres hermanos y con Buenos Aires como escenario. El primero en «abrir pista» fue el mayor de la saga, Ulises (26 años) que alcanzó su mejor ranking en 2020, llegando a ser el 236 del mundo. Sus dos hermanas pequeñas Dali y Krystal continúan también la tradición tenística de la familia.
Blanch pasó en su infancia por la academia de Rafa Nadal y después recaló en la de Juan Carlos Ferrero en Villena, donde ha llegado a ser compañero de entrenamiento de Carlos Alcaraz. De hecho, hay una curiosa anécdota con el murciano, ya que era Darwin el jugador que estaba al otro lado de la red cuando Carlitos se lesionó y tuvo que darse de baja del Open de Australia de 2023.
En sus inicios, Blanch llegó a estar bajo el abrigo de uno de los grandes entrenadores estadounidenses, Rick Macci, preparador de estrellas como las hermanas Williams. Una voz autorizada que avisa de la proyección de este joven zurdo. «Tendrá uno de los mejores golpes de derecha y saques del ATP TOUR en un futuro próximo», llegó a decir de él antes del torneo de Miami.
Al Mutua Madrid Open Blanch llega con una invitación y como número 1.028 del mundo.
