El incremento de los casos de dengue en las últimas semanas en la Argentina sembró la preocupación acerca de los efectos de esta enfermedad viral en la salud. El mosquito Aedes Aegypti es el portador de esta afección, que superó ya los 215 mil casos. En medio de la incertidumbre, los dueños de mascotas se preguntaron si esta enfermedad puede ser contraída por sus acompañantes caninos.

Si bien no hay evidencia científica ni un precedente de casos en los que los perros o los gatos presentaran dengue, tal como afirmó MSD Salud Animal Argentina, los mosquitos pueden afectar a los animales de otras formas o transmitirles otras enfermedades y comprometer seriamente su salud.

“Los mosquitos afectan a los animales, principalmente a los perros y a los gatos, a través de su picadura, que genera una sensación de picazón y enrojecimiento en la piel”, advirtió la médica veterinaria Leila Peluso (MP 14072) a LA NACION, quien destacó que en algunas ocasiones puede derivar también en alergias.

Entre las enfermedades que pueden desarrollar los perros a través de la picadura de un mosquito se encuentra la Dirofilaria immitis, también conocida como la enfermedad del gusano del corazón. Los expertos detallaron que el origen de esta patología se produce cuando el insecto transmite el parásito al animal a través de la sangre, al picarlo e ingerir la microfilaria, y este se aloja generalmente en el ventrículo derecho del corazón.

“Una vez dentro del organismo del perro, las larvas migran hacia el corazón y los pulmones, donde se desarrollan y crecen hasta convertirse en gusanos adultos”, detallaron desde el organismo. Esta enfermedad afecta principalmente al sistema cardiovascular y al cardiorrespiratorio de los perros y provocan daños en las arterias pulmonares.

Cuáles son los principales síntomas a los que se debe prestar atención en los perros

“Hay que prestar una principal atención a si el animal presenta alguna sintomatología y, en ese caso, llevarlos de inmediato al veterinario”, advirtió Peluso. Y detalló que la Dirofilaria immitis se trata de una enfermedad zoonótica, es decir, que se puede transmitir entre los animales y las personas.

Además, señaló que, en general, es una patología asintomática. “El parásito puede estar alojado en el corazón sin generar ningún síntoma, incluso durante cinco o siete años”, apuntó. Por ello, reveló las estrategias que utilizan para detectar su presencia, en los casos en los que haya ausencia de síntomas en los perros.

Realizar controles de sangre rutinarios.Examinar las sintomatologías cardíacas o respiratorias.Acudir de inmediato al veterinario si se observa tos, intolerancia al ejercicio, decaimiento o fiebre en los perros y gatos.

Cómo prevenir la enfermedad del gusano en los perros y gatos

Los expertos señalaron que la Dirofilaria immitis se presenta con mayor recurrencia en las zonas ribereñas cerca del río, como el municipio de Tigre, en la provincia de Buenos Aires, o las provincias de Salta, Formosa, Chaco, Misiones, Corrientes, Entre Ríos, Santa Fe, Santiago del Estero, Córdoba y Mendoza.

El método más efectivo, según señaló Leila Peluso, utilizar un repelente para proteger a los animales de la llegada de los mosquitos. Lo siguiente es aplicar un antiparasitario específico para combatir este tipo de patologías a la mascota de manera mensual. Así, el perro está protegido y, al recibir la picadura del insecto, “la larva ingresa pero, cuando llega a la sangre, se encuentra con el antiparasitario y muere, no puede circular”.

 

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