La primavera ha llegado este año acompañada de dos fenómenos astronómicos que coincidirán en la misma fecha: la «luna llena de gusano» y un eclipse lunar penumbral.
Este tipo de eclipses ocurren cuando nuestro satélite pasa a través de la zona de penumbra de la sombra de la Tierra, la parte más tenue. A diferencia de en otros tipos de eclipse, aquí la Luna no se ve totalmente tapada, sino únicamente oscurecida.
Existen tres tipos de eclipses lunares y siempre se producen en fase de luna llena: los eclipses totales, los parciales y, como en este caso, los penumbrales. En este artículo te damos las claves para disfrutar de estos dos eventos que, si la meteorología lo permite, serán visibles desde España.
¿Cuándo es la luna llena de marzo?
La luna llena de marzo, también llamada luna llena de gusano, alcanzará su máximo esplendor el próximo día 25 de marzo a las 08:00 de la mañana (hora peninsular española), según informa el Instituto Geográfico Nacional (IGN).
En cuanto al eclipse lunar penumbral, se iniciará un poco antes, ese mismo 25 de marzo. Este fenómeno comenzará a as 05:53 de la mañana, también hora peninsular española y durará aproximadamente 4 horas y 39 minutos.
¿Por qué se llama luna de gusano?
El nombre de «luna de gusano» o «luna de lombriz» procede de los nativos americanos. A ellos, las distintas fases lunares les servían para calendarizar sus actividades (por ejemplo, de cosecha) y otorgaban a los plenilunios nombres que sirvieran para describir eventos del momento.
Así, la «luna de gusano» hace referencia a la aparición en la superficie de las primeras lombrices de la temporada después del deshielo. Esta luna, que marca el final del invierno, se asocia además con la abundancia y con el anuncio de cosechas abundantes y diversas. La denominación fue conservada y posteriormente, se incluyó en el Almanaque del Granjero.
¿Cómo ver la luna llena y el eclipse?
Estos fenómenos astronómicos presentan este año algunas complicaciones para observarlos. El primer consejo es, igualmente, el mismo que te damos siempre: trata de alejarte de las fuentes de contaminación lumínica, especialmente de las ciudades, para evitar que su resplandor interfiera en tu visión del cielo.
El segundo consejo es que consultes la previsión meteorológica de tu área. Tristemente, este plenilunio viene acompañado de un aviso de cielos nubosos y precipitaciones bastante generalizadas en la Península, según datos de la Agencia Española de Metereología (Aemet). Si esto se cumple, será difícil que puedas observar ambos eventos astronómicos; pero no queda otra que confiar.
Por último, te recomendamos que consideres el amanecer. Aunque la previsión meteorológica acompañe, en cuanto salga el sol perderás la visibilidad. Por lo tanto, ten en cuenta -sobre todo en lo que respecta al eclipse- que para verlo, tendrás que madrugar como mínimo, más que nuestra estrella.
Con esto lo tienes todo, ¡Mucha suerte! Y si al final no se dan las condiciones para que puedas ver la luna llena, no te desesperes: el 24 de abril nos espera la «luna rosa».
