Lo que en principio va en contra de una norma básica de la fotografía que es tener el sol a la espalda para que el objeto que queremos fotografiar esté iluminado, hace que, al no seguirla en este caso, encontremos un efecto de luz diferente e imaginativo.

En muchas ocasiones, trabajar el contraluz es una técnica que aportará a las imágenes un punto de espectacularidad pero, ¿cómo podemos sacarle más partido a estas situaciones? ¿siempre debemos buscar el sol en este tipo de imágenes?

Un ciervo fotografiado a contraluz en plena berrea.

La magia del contraluz

Es una situación más que deseada por el fotógrafo: un sujeto bañado por la luz cálida del amanecer o contorneándose a contraluz con un fondo anaranjado sobre el horizonte… La fugacidad y excepcionalidad de estas condiciones lumínicas son todo un diferencial frente al resto de imágenes. Para conseguir esa imagen, todo tiene que estar en su sitio cuando llegue la luz. El fotógrafo, el sujeto a fotografiar y la luz tienen que coincidir en un momento fugaz de unos pocos minutos o, en ocasiones, segundos.

A contraluz, al tener una fuente de luz como el sol de frente, se generan unas condiciones lumínicas buenas. Sin embargo, a pesar del color que bañará toda la imagen, es posible que la intensidad siga siendo baja y sea necesario colocar la sensibilidad de la cámara en ISO 800 o más para asegurar un mínimo de velocidad en la obturación; y más todavía si el sujeto principal está en movimiento. Así pues será en primer lugar vigilar este parámetro así como la temperatura de color pues, si por ejemplo en estas situaciones seleccionamos un parámetro de balance de blancos sol o nublado, la imagen puede ser excesivamente cálida. En cualquier caso, en caso de no calcular bien la temperatura de color, disparando en formato RAW, esto se puede solucionar en el procesado de la imagen.

Varias cigüeñas en sus nidos fotografiadas al atardecer.

ISO y medición de la luz

Sea como fuere, para obtener una máxima calidad en la imagen, será preferible utilizare el ISO más bajo posible. Por ejemplo, para una situación de poca luz, deberá oscilar entre 100 y 1000, ya que nos apoyamos en la mayor fuente de luz de la escena. Mediremos la luz con la cámara subexponiendo entre -0,5 y -2 puntos, o incluso -3 puntos enteros, dependiendo de la intensidad. Además, la medición elegida en la cámara será matricial para que nuestra cámara mida toda la escena y saque una media de ella o puntual si queréis medir en un punto determinado de la imagen.

Como no podía ser de otra manera, el contraluz es un concepto distinto al de la luz a la espalda, los días nublados o a la luz lateral, ya que si con la luz lateral podemos realzar o crear volumen, con el contraluz se realzan las texturas y se siluetean los sujetos. Podemos jugar con la luz translúcida en las plumas de un ave o en las alas de una mariposa, jugar con salpicaduras, el polvo en suspensión o las cristaleras de un edificio.

Con el contraluz se consiguen realzar las texturas y siluetear los sujetos.

Además, el sol se puede quedar fuera del encuadre, justo detrás del sujeto o utilizarlo como un elemento más de la composición.

Jugar con la posición del sol puede ser un factor clave en la composición de la imagen.

La hora dorada

Sin duda, uno de los mejores momentos para conseguir una buena foto a contraluz, es el amanecer y, evidentemente, el atardecer. No siempre se puede conseguir este efecto en los atardeceres o amaneceres, pues es necesario disponer de una buena intensidad de luz y un día despejado con una buena calidad lumínica de la hora dorada, para bañar la imagen con ese dominante oro, rojizo, con un tono cálido.

De hecho, en muchas ocasiones se sacrifican otras muchas fotografías a lo largo de una sesión fotográfica para terminar consiguiendo la fotografía a contraluz perfecta de un objeto, un animal o un grupo de personas. Un sacrificio que, habitualmente merece la pena, pues las fotos a contraluz suelen destacar especialmente entre todas las imágenes tomadas, por ejemplo, durante un viaje.

Silueta de un ave a contraluz.

Trucos para conseguir mejores fotografías

  • Mide al punto con mayor intensidad lumínica.
  • Si podemos nos anticiparemos a la salida o la puesta de sol en busca el lugar correcto, todo pasará muy rápido.
  • No siempre necesitaremos el sol en nuestras imágenes para que funcione un contraluz.
  • Nos acordaremos de compensar la exposición.
  • Enfoca con un punto único de enfoque a la silueta del sujeto, fallará menos el sistema de enfoque si trabajas en autofocus.
Facebook Comments