Cuando nos sentamos al volante de un vehículo no es raro que entremos en una suerte de piloto automático, tengamos la mente en completa divagación o seamos víctimas de la somnolencia.

Para entender cómo se producen estos fenómenos es importante comprender antes cómo llegamos a aprender a conducir.

O lo que es lo mismo, cómo una habilidad que al principio necesita que pongamos toda nuestra atención y nos concentremos, acaba automatizándose.

Aprendizaje por repetición

Aprendemos y recordamos muchas cosas. El aprendizaje es el proceso por el cual adquirimos nueva información, habilidades y conocimientos.

La memoria, por su parte, constituye el mecanismo por el que éstos son codificados, almacenados y, por ende, recuperados a posteriori (es decir, la persistencia del aprendizaje en un estado que permite manifestarlo más tarde).

Facebook Comments