Una demanda presentada el martes en el Tribunal de Distrito en Nevada dio a conocer la historia de Kevin Phelps y Allison Vece, dos mellizos nacidos en 1985 a través de inseminación artificial. Sus vidas dieron un giro aterrador cuando una prueba de ADN reveló una verdad inimaginable: su sangre era compatible con la del médico que atendió a su madre durante el tratamiento.

Según informes del Miami Herald, el Dr. Joseph Plautz, obstetra y ginecólogo, fue acusado de utilizar su propio esperma para inseminar a Gayle Fedele, madre de los mellizos, sin su conocimiento. El procedimiento de inseminación artificial se llevó a cabo el 17 de junio de 1984 en Deseret Women’s Health Care, la práctica médica del obstetra ubicada en el Hospital St. Rose de Lima en Henderson, Nevada.

La demanda presentada detalla que Fedele creía que el esperma utilizado para la inseminación artificial provenía de un banco de esperma en Wyoming y que el donante posiblemente era un estudiante de medicina, según lo que Plautz le había informado en ese momento. Incluso, bromeó diciendo que el donante podría ser un “vagabundo”, según se menciona en el documento compartido por el medio estadounidense.

A lo largo de los años, Fedele había buscado información sobre el donante de esperma debido a problemas de salud de Vece, incluidas migrañas severas. Plautz le había dicho que los registros médicos se habían perdido en un incendio en el banco de esperma de Wyoming, el Rocky Mountain Cryobank en Jackson Hole. Sin embargo, investigaciones posteriores revelaron que había cerrado en 2009 y que no había registros de ningún incidente de ese tipo.

La verdad salió a la luz años después, cuando Allison Vece se convirtió en paciente de Plautz y le preguntó sobre el donante de esperma de su madre durante un examen ginecológico. En ese momento, no tenía idea de que el ginecólogo era su padre biológico.

El documental de Netflix, la prueba de ADN y la denuncia ante la Justicia

De acuerdo a lo detallado por Las Vegas Review-Journal, la prueba de ADN fue realizada años después de la muerte de Plautz, en 2015. Kevin Phelps, el hermano gemelo de Vece, descubrió que su sangre era compatible con la del médico, pero no compartió esta información hasta más tarde.

Fue en mayo de 2022, después de que ver el documental de Netflix Our Father (Nuestro padre), que trataba de un profesional de la salud que usaba su propio esperma para dejar embarazadas a pacientes desprevenidas, que Vece decidió confrontar la realidad y se sometió a los estudios correspondientes.

La sospecha se confirmó con la realización de pruebas adicionales de ADN, que revelaron una conexión genética directa entre Vece y varios mediohermanos que resultaron ser hijos biológicos del doctor Plautz. Estos resultados llevaron a los mellizos a presentar una demanda contra Deseret Women’s Health Care y Dignity Health por negligencia, fraude de fertilidad y otros cargos relacionados.

La denuncia detalla cómo Plautz utilizó su esperma sin consentimiento y sin realizar pruebas genéticas para garantizar la salud y la seguridad de los hijos concebidos a través de sus métodos. Este acto fue calificado como “despreciable y repugnante” en el documento judicial.

Según su obituario en Dignity Memorial, el Dr. Joseph Plautz ejerció la profesión en el condado de Clark durante más de 30 años, hasta su muerte en 2015. Además, tuvo 13 hijos, tres de los cuales fallecieron antes que él.