A doce días del inicio de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, las editoriales presentan sus apuestas fuertes del año. En el campo de los libros para chicos, adolescentes y jóvenes (con una presencia cada vez más importante en la feria porteña) salieron muchos títulos muy interesantes para descubrir y sumar a la biblioteca familiar. Tomen nota que hay de todo y para todos.

El legado de los impresionistas: 150 años de una muestra que transformó el arte

El taller de los cuentos de terror, de Natalia Méndez (Edelvives). “Para personas y vampiros tremebundos”: así se presenta desde la tapa esta novedad de la serie Leer para escribir. Súper recomendado este “libro taller”, ilustrado por Nat Joan que trae un código QR para acceder a material complementario y sugerencias de trabajo para poner en marcha en casa o en la escuela. Después de unas breves y clarísimas “instrucciones” para los lectores, la autora propone un pacto que viene con espacios en blanco para estampar nombre y firma. El acuerdo en cuestión apunta a aceptar las reglas del género de terror y, también, al compromiso de largarse a inventar historias. Es una invitación a leer cuentos de miedo para, luego, dejar volar la imaginación y poner manos a la obra de manera creativa. Entre varios recursos y propuestas vienen ideas para contar historias de otra manera: por ejemplo, armar una casa embrujada con fantasmas y todo. No se lo pierdan.

Otras novedades de Edelvives para buscar en la Feria

-¡Cuidadito!, de Cecilia Pisos, ilustrado por Héctor Borlasca, que transcurre durante una excursión a, justamente, la Feria del Libro.

-Isabella va a la chacra, de Nelvy Bustamante y Clau Degliuomini, de la colección Pequeletra, para leerle a los más chiquitos de la casa.

-El gigante resfriado y otros cuentos de Mediados de Febrero, de Diego Muzzio, con siete cuentos delirantes en un barrio porteño muy especial que le da título al libro.

-El contrabandista de huesos, de Franco Vaccarini, una atrapante novela para fanáticos de las historias de misterio.

-El libro perdido, de Liliana Cinetto, ideal para los amantes de los libros protagonizados por libros misteriosos.

Un viaje al universo mágico de Pablo Bernasconi

¿Cómo se hace justicia?, de Graciela Montes y Paula Bombara (Siglo XXI). “Para chicos que quieren sabe de qué se trata”, dice este libro en la portada. De la serie Entender y participar, esta novedad del sello para chicos de Siglo XXI se suma a uno de los primeros títulos lanzados este año: ¿Qué es esto de la democracia?, con textos de Montes e ilustraciones de Penélope Chauvié. Plantea cuestiones tan complejas de explicar como qué es y qué no es justo, cómo y quiénes aplican la justicia en un país y quiénes son los protagonistas principales en un juicio. Trae también códigos QR que conducen a sitios oficiales para leer la Constitución nacional y las provinciales y a las webs de instituciones como el Ministerio de Justicia y del Consejo de la Magistratura, entre otras.

Otro título imperdible de Siglo XXI para chicos es Los mocos de la furia, un inédito de Liliana Bodoc ilustrado por María Wernicke. La autora de la Saga de los confines revela a los lectores cómo fue su primer día de furia a sus nueve años y cómo se puede “conjurar” ese sentimiento con “el poder de las palabras”. Wernicke refleja con trazos sutiles y poéticos cada detalle de la escena narrada por Bodoc: “Esa fue mi primera acción. Y de inmediato se desató una performance desquiciada”. A modo de epílogo, Galileo, hijo de la escritora, cuenta: “Cuando leí Los mocos de la furia reconocí perfectamente el temperamento que mi madre cargó durante toda su vida. El que le marcó grandes caminos y fue motor de muchas decisiones: incluso, la de escribir”. No se pierdan las páginas finales, donde se reproducen las palabras sobre la furia que pronunció Bodoc en la apertura del Filba en 2017, un año antes de su muerte inesperada.

Libros inclusivos

Entre los lanzamientos recientes de Gerbera, editorial pionera en la publicación de libros inclusivos con tipografías amigables y hasta en braille, figuran Carozo de durazno, de Eva Mastrogiulio; En mi barrio, de Carolina Pierabella; Mi abuela, de Patricia Strauch y Lu Paul; ¿Qué hacen?, de Gabriela Burín; Juan quería un perro, de María Lavezzi; y uno que me fascinó: El viaje del señor Morrison, de Juan Chiavetta y Karina Di Pasquale, que retrata nada más y nada menos que a la temida muerte.

De la colección Hilos dorados, en Carozo de durazno, Eva Mastrogiulio cuenta “la historia de una niña como cualquier otra”. Es un cuento que también habla sobre la muerte, de modo poético, claro. La niña protagonista entierra todos los objetos que, de alguna manera u otra, “mueren”. Hasta que un día entierra un carozo de durazno y empieza otra historia.

Cuando bailo con mi abuela, de Liliana Cinetto y Juan Chiavetta (Riderchail). Una de mis duplas favoritas creó este libro maravilloso sobre el estrecho vínculo entre un nieto y una abuela que se ve “alterado” por la progresiva falta de memoria de la mujer. Un cuento breve, tierno y divertido, ideal para compartir en familia.

Como todos los días, de Javier Garrido (Calibroscopio). Hablando sobre la memoria, este cuento redondito y genial hilvana recuerdo tras recuerdo de dos personajes (Rosa y Rafael) que se encuentran todos los días en la Plaza Almagro. “Él no recuerda el nombre de ella y ella no recuerda el nombre de él”: a partir de ese disparador se desarrolla una historia que va hacia el pasado de cada uno y vuelve al presente que tienen en común. Una joyita.

Otros título imperdible y reciente de Calibroscopio es Mi vecina está enamorada, de Regis Lejonc: escenas, tipo cuadros o viñetas, acompañadas por apenas una frase que va narrando una historia de amor.

El día en que la Tierra y la Luna se pelearon, de David Duff y Noemi Vola (Limonero). En la próxima Feria del Libro de Buenos Aires, el sello argentino especializado en libros ilustrados presentará este libro álbum que propone un recorrido por el universo de la mano de la luna. La trama parte de una idea tan original como disparatada: la luna se cansa de dar vueltas alrededor de la Tierra y decide viajar por el sistema solar.

Visto de lejos, de Lucas Nine (Limonero). Esta novedad de marzo del autor e ilustrador argentino radicado en Francia invita a mirar las cosas desde distintos puntos de vista y a prestar atención a cómo cambia el sentido según la perspectiva. Con un estilo de dibujo muy personal, es un libro filosófico que nos deja llenos de preguntas inquietantes.

Cartas literarias

Dos nuevos juegos de naipes literarios se sumaron a la colección Tinkuy: Contame Malvinas, con prólogo del periodista, escritor y ex combatiente, Edgardo Esteban e ilustraciones del artista, ilustrador y diseñador gráfico, Pablo Patini, invita a crear relatos con sitios y paisajes de las islas, su flora y fauna y su geografía con diversidad de climas; y La poética del té, inspirada en una idea excelente: la tradicional ceremonia del té.

Las cartas traen versos de grandes poetas como Hugo Padeletti, preguntas desafiantes como “¿Qué sentimientos guarda el último sorbo del té?” y otras con recetas, ingredientes y variedades. Original y exquisito, dan ganas de ponerse ya a jugar a La poética del té.