La comodidad de las mascotas puede incidir en diversos aspectos, pero la creación de un ambiente en el que se busque potenciar su interacción con el ser humano es ideal para mantener la buena salud de los animales. En este sentido, con los gatos hay un singular detalle que puede cambiar su actitud, al encontrar confort en diversos sonidos que lo alientan a pasar un buen momento y desarrollar su capacidad auditiva.
Los gatos tienen distintas características que los posicionan como uno de los animales más elegidos para ser compañeros del ser humano. Pero hay otras tantas que son pocas conocidas, como su amplio rango auditivo, que es uno de los “más amplios entre los mamíferos”, según una investigación llamada “Estudio sobre audición de gatos domésticos”, publicada en Science Direct. Allí se especifica que es cuatro veces más alto que el de las personas.
De acuerdo a diversas investigaciones, los felinos se ven atraídos por ruidos puntuales que los animan. Según el sitio Experto animal, el instinto salvaje de estos animales predomina en su accionar, es por ello que los sonidos pertenecientes a la naturaleza son los de su mayor agrado, puntualmente los que emiten sus presas como aves, ratones e insectos, que pueden ser imperceptibles para el oído humano, pero que a ellos los alerta para una búsqueda. Esto también puede generar que el felino se quede quieto, un clásico accionar que llama la atención de sus dueños con frecuencia.
La misma reacción causan los diversos sonidos que emite la naturaleza, como el soplido del viento o el correr del agua. Estos despiertan el instinto de caza del animal. A su vez, el ronroneo de un par es otro de los que forma parte de la lista, ya que en recién nacidos se trata de una comunicación fundamental, debido a que dependen meramente de su madre; en edad adulta, generalmente lo usan para demostrar que le temen a algo o se sienten inseguros.
Pero yendo a aquellos que genera el ser humano con sus actividades diarias, los que los alerta positivamente son aquellos relacionados con la preparación de la comida, ya sea con la apertura de la heladera, alacenas, latas y bolsas, que los acerca a la persona que los está manipulando.
En esta línea, no puede faltar el clásico “pspspsps” con el que el históricamente se los llama a los gatos y ante el que ellos responden de inmediato, presuntamente por la adaptación que tuvieron a lo largo del tiempo con este sonido. Asimismo, la voz de su dueño también es algo con lo que estos animales sienten confort, al mantener un vínculo afectivo.
Por último, se identifica a la música como uno de los sonidos que le gustan a los gatos. Tanto las melodías suaves como la música clásica son capaces de generarles un estado de relax. El violín, el violonchelo y el teclado electrónico son los instrumentos que se asemejan a las vibraciones del ronroneo, por ello pueden causan un sentimiento pacífico en ellos.
