Muchos vehículos de nuestro país incluyen el accesorio de una bola de remolque en la parte trasera. Este utensilio permite transportar caravanas, motos, barcos, bicicletas y otros vehículos.
No obstante, también puede conllevar problemas con el tráfico si el conductor desconoce la legislación pertinente. En este artículo encontrarás todo lo que necesitas saber sobre este accesorio para no recibir una multa.
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El Código de Circulación no hace ninguna referencia a que los conductores deban desmontar la bola de remolque una vez dejen de utilizarla en el vehículo. Ahora bien, hay un par de casos en los que no hacerlo podría provocar una infracción de tráfico.
Al instalar un enganche de remolque, hay que tener en cuenta que se debe comprobar su homologación por la Unión Europea. Además, también debe instalarse en un taller autorizado, solicitando en la estación ITV una inspección por reforma de gravedad. En la misma, se debe presentar un informe de conformidad y un certificado de instalación del taller que ha hecho la instalación.
Habitualmente, el taller enviará una copia del certificado de instalación y de la ficha técnica de nuestro vehículo al fabricante del gancho. Para superar la inspección técnica de vehículos disponemos de un plazo máximo de 15 días naturales, pero si un agente nos detiene sin tener la documentación, podría sancionarnos con una multa de hasta 400 euros.
Finalmente, si quieres llevar una bola de remolque en tu vehículo debes tener en cuenta el artículo 14 del Reglamento General de Circulación. Este indica que la carga del vehículo y los accesorios empleados para su acondicionamiento o protección deben estar dispuestos de tal manera que no oculten los dispositivos de alumbrado o señalización luminosa, así como las placas o distintivos obligatorios y las advertencias manuales de los conductores. Obstaculizar la visibilidad de la matrícula puede conllevar una sanción económica de hasta 200 euros.
