Con la mira puesta en Diputados, donde en los próximos días se volverá a tratar la “Ley de bases” y la reforma fiscal, el Gobierno recibirá hoy a un grupo clave de legisladores. El ministro del Interior, Guillermo Francos, será el anfitrión en la cita con los diputados de Innovación Federal, el bloque que se conformó en diciembre pasado con representantes de Salta, Misiones, Rio Negro y Neuquén, y con el que hasta ahora la Casa Rosada no había acercado posiciones. De hecho será la primera vez que los representantes de ese espacio esquivo para los libertarios visiten la sede de Gobierno.
De cara al tratamiento de ambas leyes, los nueve votos que suman los miembros del espacio, encabezados por la salteña Pamela Calletti, lucen fundamentales para el Gobierno. El espacio se completa con Pablo Outes y Yolanda Vega, también por Salta; Carlos Fernández, Daniel Vancsik, Yamila Ruiz y Alberto Arrúa, de Misiones; Osvaldo Llancafilo, de Neuquén, y Agustín Domingo, de Río Negro. En febrero pasado, durante la primera votación por la ley ómnibus, el espacio le dio su apoyo a la norma a nivel general, pero plantaron diferencias en la votación particular que, sumadas a las disidencias de otros bloque, llevó al oficialismo a retirar el proyecto del recinto.
El encuentro está previsto para las 11.30 y se sumará al raid de reuniones que Francos tuvo en las últimas horas. El martes por la mañana recibió al gobernador Claudio Vidal, de Santa Cruz, poco antes de viajar hacia Paraná para participar de un encuentro con Maximiliano Pullaro, de Santa Fe; Martín Llaryora, de Córdoba, y Rogelio Frigerio, de Entre Ríos.
Inmediatamente después de ese encuentro con los tres mandatarios, que se mostraron predispuestos a aprobar la “Ley de bases” en el Congreso y a quienes Francos le dedicó palabras elogiosas, el ministro voló hacia Santiago del Ester, donde al atardecer se encontró con el gobernador Gerardo Zamora, en un encuentro de alto voltaje político.
Zamora podría ser un actor clave fundamentalmente en el Senado, donde el Poder Ejecutivo avizora un escenario más difícil que en Diputados. Con el mandato de Javier Milei, desde hace algunas semanas, Francos trabaja en el diálogo con los jefes de bloque del Senado para sumar votos que permitan que “la ley de Bases” y la fiscal sean finalmente sancionadas.
Exradical, Zamora es un gran aliado de Cristina Kirchner e impulsó la candidatura de Sergio Massa en 2023. Podría convertirse en un actor fundamental para la administración libertaria al tener tres senadores que le responden y que podrían destrabar la votación en la Cámara alta, donde la suma de La Libertad Avanza está ajustadísima y ya sufrió semanas atrás un duro revés con el rechazo al DNU 70/2023.
De los gobernadores del norte, Zamora es uno de los pocos con los que hasta ahora el Gobierno no tiene una fluida, como sucede con Raúl Jalil, de Catamarca, u Osvaldo Jaldo, de Tucumán, que se han mostrado más afines desde el primer momento.
Pero además de los votos inmediatos que el oficialismo necesita para la “Ley de bases”, Zamora puede ser una de las llaves que le permitan al oficialismo avanzar con el pliego del juez federal Ariel Lijo para llegar a la Corte Suprema de Justicia.
El futuro de la “ley de Bases” y Fiscal
El Gobierno se prepara en las próximas horas para tratar primero en plenario de comisiones y luego en el recinto de la Cámara de Diputados tanto la nueva versión de la “Ley de bases” como la ley fiscal, la cual tiene entre sus puntos salientes la restitución de la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias, con un piso de $1,8 millones para solteros y $2,2 millones para casados con dos hijos.
Estas reformas son el resultado del último mes de negociaciones con los jefes de los bloques de la oposición dialoguista y los gobernadores, con los que el Gobierno empezó una nueva etapa en marzo pasado. Fue tras el discurso ante la Asamblea Legislativa que dio el presidente, en el que convocó al Pacto de Mayo y desde el que se empezó a trabajar para destrabar ambas leyes luego de que la primera versión de la ley de Bases fuera retirada del recinto durante su tratamiento.
Una semana antes de eso habían retirado el capítulo fiscal, por lo que ahora este cursará separado, ya que no tiene trámite parlamentario como la “ley de Bases”. Con ambas iniciativas, el Poder Ejecutivo cifra sus expectativas de poder avanzar en reformas y desregulación de la economía.
En el Parlamento también se sumará a la “Ley de bases” el proyecto de reforma laboral “light” que propuso el radicalismo para incluir allí parte de lo que contemplaba respecto del tema el DNU 70/2023 y que quedó frenado en la Justicia tras un amparo del sindicalismo.
