A casi una semana del último crimen contra inocentes en Rosario, que derivó en el desembarco de efectivos de las fuerzas de seguridad federales y la puesta en marcha de un Comité de Crisis, el frente de un edificio fue baleado por dos hombres que se movilizaban en una moto y se dieron a la fuga tras dejar un nuevo mensaje intimidatorio.
El objetivo de la balacera fue el frente de un edificio de viviendas particulares situado en la calle Castellanos 1518, en el barrio Echesortu.
Según el parte policial y las primeras pesquisas, fueron nueve las detonaciones que hizo el hombre que iba en la parte de atrás de una moto que frenó en frente del edificio, en momento en que no había ninguna persona, y disparó. Además, arrojaron una piedra que tenía un mensaje cuyo contenido aún no trascendió.
Los impactos provocaron la rotura y daños en los blindex del edificio. Además, se encontraron varias vainas servidas sobre la calle y la nota que envolvía a una piedra y estaba pegada con cinta. Tras el acto intimidatorio, los dos hombres huyeron en la moto que, según los testigos, sería de alta cilindrada. Por el ataque, no se registraron personas heridas.
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