Actualizado: Guardar

Inglaterra se despertó este jueves eufórica tras la polémica victoria contra Dinamarca (2-1) en la prórroga, que le permitirá el próximo domingo disputar ante Italia en Wembley su primera final de una Eurocopa. Más de medio siglo después de ganar su Mundial con los míticos Gordon Banks, Jack y Bobbu Charlton, Bobby Moore o Geoff Hurst, los ‘Three Lions’ acarician al fin su segundo gran título por increíble que parezca.

Llegados a este punto, el resultadismo se impone en el Reino Unido, cuna se supone de los valores del ‘fair play’. Pocas referencias a la polémica, a ese extraño penalti sobre Raheem Sterling que noqueó a Dinamarca, y al juego discreto del combinado de Gareth Southgate, técnico muy poco intervencionista en el desarrollo de los partidos.

La noticia ocupó las portadas de todos los diarios, con la excepción del ‘Financial Times’, y las publicaciones competían en superlativos. «Inglaterra hace historia», escribió ‘The Times’, 55 años después del triunfo inglés en el Mundial de 1966, su único título. ‘The Sun’ hacía alusión a la que es «probablemente la mejor sensación del mundo», parafraseando al conocido eslogan de la cerveza danesa Carlsberg, mientras para el ‘Daily Star’ esta victoria es «el mayor sueño de todos los tiempos». «Es un sueño para Inglaterra», agregaba ‘The Guardian’. Ante la histórica proeza, diarios como el ‘Daily Mirror’ y el ‘Daily Express’ hacían juegos de palabras con «final» y «finalmente».

También los políticos británicos se deshicieron en elogios. El primer ministro Boris Johnson, que el miércoles por la noche vistió la camiseta blanca de la selección inglesa en Wembley, destacó la «fantástica actuación del equipo de Gareth Southgate», pidiendo en Twitter que traigan el trofeo «a casa».

En el canal Sky News, su ministro de Finanzas, Rishi Sunak, calificó la victoria de «momento fantástico para el país» y recordatorio de «cómo era la vida antes del coronavirus». Esto «une al país», añadió Sunak en declaraciones a la BBC, y beneficia a la economía: se ha permitido que los pubs permanezcan abiertos más tiempo el domingo, para no frustrar a los aficionados en caso de prórroga.

Matices en Escocia

Según la publicación Politico, un triunfo contra Italia podría llevar al gobierno a conceder la Orden del Imperio Británico (MBE) al seleccionador de Inglaterra, Southgate, y a varios jugadores.

El estado de ánimo era mucho menos eufórico en Escocia, región británica con un fuerte movimiento independentista y cuya selección fue eliminada en la fase de grupos. Para la edición escocesa de ‘The Sun’, Inglaterra solo llegó a la final gracias a «un polémico penalti», transformado en dos tiempos por el capitán Harry Kane.

Ver los comentarios

Facebook Comments