La carrera del GP de España de Fórmula 1 tendrá aficionados, algo que se decidió a última hora y casi de tapadillo, después de que durante meses las autoridades sanitarias catalanas se mostraran reticentes. Sólo habrá 1.000 personas, todos ellos socios del Circuit de Barcelona-Catalunya, y sólo podrán acceder a la carrera y no a los entrenamientos libres ni a la clasificación como otros años.

Las bulliciosas gradas de Montmeló no estarán llenas de aficionados para evitar convertirse en un foco de contagios de Covid, en un momento en el que la región catalana no está mostrando buenos datos con respecto a otras comunidades.

Aunque es un evento al aire libre y se puede mantener la distancia, desde la Generalitat argumentaban que el problema era el trayecto hasta allí en transporte público y no tanto la presencia en las gradas. Para minimizar riesgos han establecido un pequeño protocolo sanitario que tendrán que seguir esos 1.000 espectadores con entrada para el domingo. Unas medidas justas, pero esperan que suficientes pese a que no exigen test PCR o de antígenos, algo que estuvo encima de la mesa como propuesta inicial.

Buenos días!!!! 😎☺️ #F1 #SpanishGP pic.twitter.com/4XGWIcWhJa

— Circuit de Barcelona-Catalunya (@Circuitcat_es) May 7, 2021

Además de la mascarilla, complemento obligatorio, se les tomará la temperatura en la entrada al recinto, que se realizará por varias puertas para evitar que esas 1.000 personas coincidan. Una vez situados en sus lugares, no podrán moverse mucho y tendrán que guardar 2 metros de distancia con los demás. Además, queda prohibido comer, beber y fumar. Por otro lado, las salidas se realizarán por las mismas puertas y han recomendado hacerlo de manera escalonada.

El GP de España suele albergar más de 40.000 personas en sus gradas, si bien en los últimos años había decaído su afluencia. La buena organización de esta edición será clave, dado que la continuidad de Montmeló está en el aire a partir de la próxima temporada.

Facebook Comments