Mike Pompeo y Sergei Lavrov.Derechos de autor de la imagen Getty Images
Image caption Las posturas de Pompeo y Lavrov sobre Venezuela siguen muy alejadas.

«Tenemos desacuerdos sobre Venezuela». Con esta frase resumió el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, el resultado de las conversaciones que este martes sostuvo sobre la situación del país sudamericano con el ministro de Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov.

Ambos jefes diplomáticos se reunieron en la ciudad rusa de Sochi para discutir varios temas cruciales de la agenda internacional, incluyendo el estado de las relaciones bilaterales, los acuerdos sobre control de armamento nuclear, la cooperación contra el terrorismo y la situación en países como Siria, Ucrania y Afganistán.

La crisis política en Venezuela fue un asunto central dentro de esa amplia agenda, según destacaron ambos funcionarios.

La crisis venezolana ha adquirido una dimensión internacional, especialmente después de que el líder opositor Juan Guaidó se proclamara presidente interino del país el pasado enero y medio centenar de países le respaldaran, el primero de ellos, Estados Unidos.

Guaidó pide la salida de Maduro al considerar que asumió ilegítimamente su cargo tras unas elecciones «fraudulentas». Maduro asegura que ganó legítimamente y denuncia que Washington está orquestando «un intento de golpe de Estado» en el país.

«Democracia»

En una rueda de prensa conjunta, Pompeo explicó que durante el encuentro había urgido a Rusia a apoyar el «retorno de la democracia» en Venezuela y a retirar su apoyo al presidente Nicolás Maduro.

«A Nicolás Maduro le llegó la hora de irse, él no ha traído más que miseria a los venezolanos y esperamos que el respaldo de Rusia a Maduro acabe», señaló Pompeo.

El funcionario estadounidense destacó que Venezuela es un país con grandes riquezas que necesita reconstruirse pero advirtió que para que eso ocurra es necesario que puedan celebrarse elecciones libres.

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Image caption Lavrov aseguró que no es posible imponer la democracia por la fuerza.

«Queremos que cada país que esté interviniendo en Venezuela deje de hacerlo. Queremos que los venezolanos recuperen su democracia y tengan elecciones libres y justas. Así que, sean fuerzas iraníes, chinas, cubanas u otras, la posición del gobierno de Trump es que deben dejar de tener un impacto y deben poner fin a su apoyo a Maduro», apuntó el funcionario estadounidense.

Su petición de que Moscú retire su soporte a Maduro, sin embargo, fue rechazada por Lavrov, quien dijo ante la prensa que las amenazas de Washington contra el mandatario venezolano no tienen nada que ver con la democracia.

«La democracia no se logra por la fuerza«, manifestó el diplomático ruso.

«Hay que recordar lo que ocurrió en 2003. En mayo de 2003 escuchamos como George W. Bush dijo que no había democracia en Irak y recuerden como en 2011 se dijo que Muamar Gadafi ya no estaba y ahora habría democracia en Libia, y todos sabemos de primera mano qué tipo de democracia hay ahora en Irak y en Libia. Sabemos que nada bueno salió de allí», apuntó.

Mecanismo de Montevideo

En ese sentido, Lavrov expresó el apoyo de Moscú a fórmulas como el Mecanismo de Montevideo, impulsado por los gobiernos de México y Uruguay como una fórmula para buscar una salida negociada a la crisis venezolana a través del diálogo entre las partes.

El funcionario ruso resaltó que esa iniciativa es bien vista por Maduro.

El Mecanismo de Montevideo es rechazado por la oposición venezolana, que descarta volver a sentarse con el gobierno, pues consideran que utilizó los intentos anteriores de diálogo para aplacar las protestas callejeras en lugar de para buscar una verdadera solución a la crisis política del país.

Pese a sus palpables diferencias en torno a Venezuela y a otros de los asuntos abordados en la reunión, Lavrov y Pompeo coincidieron en valorar positivamente su encuentro como una suerte de primer intento para cerrar la creciente distancia que les separa.

En el caso venezolano, esta posibilidad fue destacada por Pompeo, quien señaló que «pese a nuestros desacuerdos, continuaremos hablando para encontrar una solución a la crisis humanitaria en ese país».

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