Xavi, si nada cambia, dejará el banquillo del Barça cuando finalice la temporada, por lo que el de este domingo será su último clásico como técnico. En dos temporadas y media (llegó en noviembre de 2021), habrá disputado diez partidos contra el Real Madrid en tres competiciones distintas, Liga, Copa y Supercopa de España. El registro del egarense es de cuatro victorias y cinco derrotas, por lo que no solo están en juego tres puntos que permitirían seguir soñando con el título, sino también despedirse de su etapa como entrenador con un balance equilibrado.
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Será, seguro, un partido especial para Xavi, que visitará por cuarta vez el Santiago Bernabéu como máximo responsable del conjunto blaugrana, la tercera en el campeonato de Liga. Sus números como visitante en el clásico son muy buenos porque con él en el banquillo el Barça ha sido capaz de ganar dos veces y solo ha perdido una. La primera vez que se plantó en Chamartín el encuentro acabó 0-4, con doblete de Aubameyang. La temporada siguiente, en la novena jornada, los blancos se impusieron 3-1, aunque el Barça acabaría ganando el título. El tercer duelo fue el de la ida de semifinales de Copa la pasada campaña, un 1-0 que no sirvió para clasificarse porque los de Ancelotti remontaron con un 0-4 en el Camp Nou.
Ganar este domingo permitiría a Xavi despedirse del clásico con buen sabor de boca, más allá de cómo acabe una temporada en la que solo habría opciones de remontar los cinco puntos que separarían al Barça del Real Madrid para conquistar el título. Además de la Copa y la Liga, el técnico también se ha medido a los blancos tres veces en Arabia Saudí con la Supercopa de España en juego. La única victoria, la final de la pasada temporada, sirvió para ganar el trofeo.
De todas formas, los últimos resultados no han sido buenos para el conjunto blaugrana, que encadena ya tres derrotas frente al equipo que dirige Carlo Ancelotti. El 0-4 ya comentado de las semifinales de Copa de la pasada campaña, el 1-2 con doblete de Bellingham en el clásico liguero de la primera vuelta y el 4-1 en la final de la Supercopa en Riad. Toca cambiar esta dinámica para apurar las opciones de ganar la Liga por segundo año consecutivo. También para que Xavi se despida con buen sabor de boca del Santiago Bernabéu.
