Muchas personas creen que solo hay que bajar la cisterna del baño para evitar y eliminar bacterias. Sin embargo, un estudio publicado en la revista Scientific Reports, probó que esto no es suficiente; también, se debe cerrar la tapa.
Cuando se descarga el inodoro, las partículas viajan hacia arriba, atrás y al frente. De esta forma pueden esparcirse en el techo y las paredes del baño. Por lo tanto, la opción más sanitaria es hacerlo con la tapa cerrada.
Para obtener los resultados, el equipo utilizó una cámara de alta velocidad y un láser color verde para poder identificar en dónde quedaban las bacterias. Publicaron un video del experimento en el que se ve la rapidez con la que las partículas aéreas se propagan.
Los investigadores encontraron que estos aerosoles del inodoro eran disparados con una velocidad de dos metros por segundo y, en tan solo ocho segundos, podían llegar a 1,5 metros por arriba del sanitario.
“Nuestros resultados demuestran el crecimiento sorprendentemente enérgico y rápido de las columnas de aerosol de un inodoro comercial y resaltan la naturaleza caótica de la cinemática del fluido que transporta las partículas”, indicaron en el informe.
Esto puede ser perjudicial para la salud, ya que estos aerosoles esparcen patógenos que se encuentran en las heces, materia fecal y partículas de agua. La exposición a estos agentes infecciosos puede ser nociva para la salud, pues podrían contener norovirus, adenovirus, E.coli o C. difficile.
Los efectos pueden ser molestos, lo más recomendable es visitar un centro de salud cercano. Por ejemplo, el norovirus puede causar vómito y diarrea, mientras que el adenovirus está asociado con síntomas como resfriados, dolor de garganta, bronquitis, neumonía, diarrea y conjuntivitis, entre otros, de acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades.
Por otro lado, otro estudio, realizado por el microbiólogo Charles Gerba y su equipo de investigación, determinó que la manera más efectiva de reducir la posibilidad de contagio de estos virus y bacterias es desinfectar frecuentemente el inodoro y las superficies a su alrededor.
Por Sofía Arias Martínez
