El viernes 12, el príncipe Harry (39) y Meghan Markle (42) concentraron miradas y flashes durante el Royal Salute Polo Challenge que tuvo lugar en Wellington, Florida, el torneo de polo solidario con el que se recaudaron fondos para Sentebale, la fundación benéfica del príncipe que ayuda a niños y adolescentes con VIH de Lesoto y Botsuana (África). Vestido con los colores azul y blanco de su equipo, Harry no sólo demostró su gran talento para el polo, sino que también dejó en evidencia la buena sintonía que tiene con el resto de los players de Royal Salute Sentebale, que se coronó campeón por un ajustado 1 a 0. Tras la victoria, Meghan fue la encargada de entregarles el trofeo a los campeones, instante que el príncipe coronó con un beso de película. Todo un gesto de amor con el que los duques de Sussex vuelven a dar testimonio del dulce momento que atraviesan después de cuatro años alejados de la Corona británica, y que contrasta con los días difíciles que vive la familia real a partir del diagnóstico de cáncer del rey Carlos III y de la princesa de Gales. Además, como todos los años, Harry y Meghan disfrutaron de esta cita deportiva con la solidaridad rodeados de amigos como la pareja de argentinos Ignacio Figueras y Delfina Blaquier –quienes dijeron presente en el evento junto a su hija más pequeña, Alba–, y Adolfo Cambiaso, el mejor polista del mundo. “Siempre es maravilloso estar juntos, haciendo dos cosas que amo: jugar al polo con buenos amigos y colaborar con una causa increíble como la de Sentebale. He sido embajador de Sentebale por más de una década y es algo que está muy, muy cerca de mi corazón”, contó después del match Nacho Figueras, que lideró el Grand Champions Team, equipo que enfrentó a Royal Salute Sentebale.
