La alianza entre la prestigiosa marca creadora de festivales inmersivos elrow y Grandvalira ha traído a Andorra por segundo año consecutivo el festival Snowrow, que ha concluido hoy domingo después de cuatro días de música y actividades y que, un año más, ha sido todo un éxito.

Más de 6.000 asistentes diarios han pasado por la gran carpa central de elrow durante el Festival de Tarde, un escenario reservado a los mayores de edad y que ha hecho vibrar el suelo andorrano con DJ de lujo y talentos emergentes, mientras que muchas familias han disfrutado también del Festival de Día con escenarios y activaciones repartidas por los sectores de Pas de la Casa y Grau Roig con mucha música, actividades de nieve, competiciones y juegos para todas las edades. La particularidad del Snowrow es precisamente esta diversificación de espectáculos, una característica de la cual el fundador de elrow, Juan Arnau, se muestra muy orgulloso: “Nos gusta hacer un producto diferente, un producto de día en el que hay familias y niños con todo tipo de actividades, y la verdad que ver cómo todo el mundo disfruta, esquía durante el día y baila por la tarde, nos encanta. Tener un producto así en elrow a nivel mundial es un gran éxito para la marca”.

A nivel de organización, el montaje del festival ha sido de por sí todo un evento, para el cual se han necesitado 55 tráileres, 250 operarios y otros 250 trabajadores durante el festival, entre ellos 150 animadores que son gran parte del espíritu elrow. En este sentido, Juan Arnau ha querido dar las gracias a todos los implicados en la organización de este gran evento y ha expresado que “estamos muy contentos de estar en Andorra con esta segunda edición del festival elrow en la nieve, único en el mundo, y estamos muy agradecidos a Grandvalira, a la familia Viladomat y a todos los estamentos públicos que nos apoyan como Protección Civil, la Policía y demás.”

Grandvalira cierra con el Snowrow la temporada 2023-2024, unas jornadas en las que los esquiadores han podido disfrutar de unas buenas condiciones de nieve gracias a las intensas nevadas de la semana pasada. Para el director general de Grandvalira Resorts, Juan Ramón Moreno, “ha sido la guinda del pastel, lo cierto es que hemos terminado la temporada con unas condiciones de nieve muy buenas, la gente ha podido disfrutar hasta el último momento, ha hecho un tiempo fantástico, y encima con este entorno del festival elrow, con un montón de asistentes y gente que se lo ha pasado fenomenal, y además con la ventaja de los dos públicos: por un lado las familias y por el otro ambiente musical con gente más joven”.

Un cartel de lujo

El Festival de Tarde, el plato fuerte del Snowrow, ha contado con las actuaciones de DJ de gran reconocimiento internacional de la talla del DJ y productor napolitano, Marco Carola, el sueco Adam Beyer, capitán del prestigioso sello Drumcode, y el DJ y productor de Livorno, Ilario Alicante, que han encabezado un cartel con más de 40 artistas invitados de renombre mundial y talento emergente como Andrea Oliva, Ariel Free, Bastian Bux, Daniel Orpi, De La Swing, George Privatti, Guti (Live), Kesia, Latmun, Marco Maya, Mau P, Melanie Ribbe, N!do, Nic Fanciulli, Olive F, Rendher b2b Ale de Tuglie y Toni Varga. También ha estado representado el talento local con los artistas Angel de Andrés, Burana, Casi Álvarez, Edu_Art, Laeet, Meiken, Noe Osses, Nyl_on, Patricia Mantovani, Santa Cruz, Santi Nocquet, Slidewayz Soundsystem (Ru Ondo & Wild Value) y Vittosky. Entre todos han ofrecido una amplia variedad musical, desde el techno más vibrante hasta el house y el disco más cautivador, que ha hecho vibrar la catedral rosa mítica de los festivales elrow.

Las jornadas del festival han contado con hasta 8 escenarios repartidos por los sectores de Pas de la Casa y Grau Roig donde ha sonado la música sin parar durante todo el día y donde se ha podido disfrutar de Secret Parties y fiestas après-ski, con los restaurantes El Refugio del Llac dels Pessons, La Coma 3 y la zona de Coll Blanc, a 2.500 m de altitud, como puntos calientes. En cuanto a la vertiente familiar, el Family Dome y el Kids Garden han centralizado las actividades para todos los públicos con máquinas y atracciones llenas de fantasía, burbujas y luces, un iglú gigante, espectáculos teatrales, manualidades y gincanas.

Los más atrevidos han podido participar en los Rowlympics Games, unas carreras de descenso con artefactos de construcción casera donde también se ha premiado el mejor disfraz o en la Slidewayz pool party, una fiesta muy divertida que ha cerrado el festival invitando a cruzar la piscina con esquís o tabla de surf. Un buen final para el festival y para la temporada.

 

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