Roberto de Zerbi será uno de los ‘caramelitos’ del próximo mercado de entrenadores, un hombre que ha maravillado a toda Inglaterra desde que llegase como sustituto de Graham Potter al Brighton y clasificase a los ‘seagulls’ para competición europea.
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El italiano está contento en la soleada Brighton, pero sabe del interés de otros grandes para hacerse con sus servicios. Equipos como Liverpool y Bayern siguen buscando candidatos para ocupar sus banquillos la próxima temporada, dos gigantes que buscan un perfil atractivo como el de Roberto para empezar a cimentar sus proyectos deportivos.
De Zerbi quiere ambición en Brighton
Una de las claves para descifrar el futuro del entrenador serán los despachos. Según apunta Fabrizio Romano, De Zerbi quiere tener una reunión con la directiva del Brighton para esclarecer sus intenciones de cara al futuro. Es un hombre ambicioso y quiere que el club también lo sea con posibles llegadas que aúpen al equipo al siguiente nivel.
El Brighton marcha 9o en la Premier League con 42 puntos y tiene prácticamente imposible alcanzar los puestos de Europa que marca ahora el Tottenham con 56 puntos. Las salidas de McAllister y Moises Caicedo el pasado verano han hecho mella en el rendimiento general del equipo y De Zerbi quiere volver a luchar por el ‘Top six’ inglés el próximo curso. Necesitan refuerzos este próximo mercado para hacerlo realidad.
Bayern y Liverpool ya saben la cláusula
El técnico posee una cláusula de 12-13 millones de libras solamente válida este verano, por lo que otros equipos podrían ficharlo si deciden abonar esta cantidad, más que razonable para super potencias económicas como lo son Liverpol en Inglaterra o Bayern de Múnich en Alemania.
Tal y como señala el periodista, en el club bávaro ya tienen su nombre en la zona noble de la lista de candidatos. La marcha de Thomas Tuchel ya es oficial y el Bayern quiere pasar página con un modelo de fútbol más asociativo y vanguardista como el que propone De Zerbi. En el Liverpool aún no ha habido conversaciones, pero estas tardarán poco en activarse si las reuniones entre Brighton y entrenador no llegan a buen puerto.
