Luego de que el ministro de Economía, Luis Caputo, anunciara la eliminación de los aranceles de importación a la urea y sus mezclas con nitrato de amonio, en el agro dijeron que la decisión va a “ayudar” a los productores. No obstante, también hay dudas considerando que a nivel nacional se produce más del 60% de este fertilizante. Fuentes del mercado analizaron que el impacto de esta medida en la nueva campaña rondaría los 30 millones de dólares.

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En la red social X, el funcionario expresó: “Atentos a las necesidades del campo, y en aras de mejorar su competitividad, vamos a avanzar en la eliminación de los aranceles aplicados a la urea y sus mezclas con nitrato de amonio, que actualmente se ubican en 5,4 y 3,6%”. Para los expertos todavía es difícil medir el impacto de esta decisión, pero rondaría los US$30 millones en la nueva campaña.

“Esta medida implicará un impacto directo a los productores agropecuarios de todo el país y se suma a los beneficios generados por el ordenamiento de las variables económicas, que permitió que el costo de estos insumos fundamentales para el productor agropecuario, bajara de US$830 desde el 15 de febrero a US$570 en la actualidad”, señaló Caputo.

Santiago del Solar, productor agropecuario y director de la Comisión de Granos de la Sociedad Rural Argentina (SRA), sostuvo que esto, efectivamente, va a permitirle una ayuda al productor. “Claro que ayuda. Un 5% del arancel que bajen en un fertilizante que vale US$500 o un poquito más, son 25 o 30 dólares por tonelada. Es bastante plata y así que eso tiene un impacto que para nosotros es positivo, por supuesto que el Impuesto PAIS pesa muchísimo, porque es un 17,5%, pero esto es una buena noticia. Es una medida en el sentido correcto”, aseveró.

En enero pasado, según Márgenes Agropecuarios, el precio de la urea era de US$950 la tonelada, en febrero cayó a US$830, en marzo cerró en US$780 y en abril ronda US$650.

En ese contexto, el consultor de esta industria, Eddy Fay, precisó que el anuncio del ministro es una buena señal, pero observó: “Son buenas señales, pero no suficientes para que mejoren en algo los márgenes de producción del campo. El alquiler de campo sigue dando negativo para el trigo. El cambio más importante sería sacar impuesto PAIS o reducirlo, en los insumos. El impacto de esos aranceles que sacaron para trigo serían aún más grandes si se aplican a fosfatos importados”.

Desde la consultora AZ Group dijeron que, al igual que en los herbicidas, cuyo anuncio realizó también Caputo esta semana, la medida va en un buen rumbo y es una buena señal, pero en los efectos prácticos “es limitado”. En rigor, según los cálculos para una zona triguera de la provincia de Buenos Aires los costos de implantación son de US$344,9 [incluye labores, semilla y fertilizantes] por hectárea sobre un costo total de US$1000. En el número global los fertilizantes representan US$102. Estimando que todo el rubro fertilizantes fuese urea, si le sacan el 5% y hay un gasto de 102 dólares en fertilizantes, el efecto práctico es escaso sobre 1000 dólares.

Añadieron que más del 50% del fertilizante que se consume en el país es de industria nacional. El ministro no dijo nada de los fosfatados que son 100% importados. “Esto tiene el beneplácito de los productores, marca un rumbo y da señales que al gobierno le preocupa la producción agropecuaria y el trigo; ojalá que haya una reducción en los fosfatados o las retenciones que tiene el trigo”, mencionaron.

“En el caso de los fertilizantes tiene un impacto mayor por la participación en porcentaje de estos en los costos de producción, aunque los aranceles de los mismos son mucho más bajos que el de los herbicidas. Esperamos que se traduzca en baja de los fertilizantes importados y reacomodamiento y baja de los nacionales si están sobredimensionados sus precios, porque hay que detectar y corregir abusos, no bajar aranceles e impuestos a lo de afuera solamente, sino que también examinar los costos de la industria nacional y la incidencia de los impuestos en el valor final de los fertilizantes y herbicidas de industria nacional”, dijo Carlos Achetoni, presidente de la Federación Agraria Argentina [FAA].

En esa línea, el ruralista mencionó que se debe ir por una baja de retenciones e impuestos en la producción agropecuaria para que den los números y el país sea competitivo a nivel internacional.

David Miazzo, economista de DATA Miazzo, celebró el anuncio: “Excelente medida del Gobierno: eliminar aranceles a la importación de urea. Si bien la incidencia es baja, menos del 1% sobre los costos de producción del trigo, también tendrá impacto en el resto de los cultivos hacia adelante. Es menor al 1% porque es el 5,4% del precio CIF, que en el mercado actual es 50-60% del precio al productor. Por lo que la incidencia en el precio es del 3%”.

 

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