Sorpresa mayúscula en el FC Barcelona por unas declaraciones de Josep Cubells, secretario de la junta directiva y máximo responsable de la sección de baloncesto, a `La Vanguardia’. “En esta junta hay muchas personas que dedicamos muchas horas al club y lo normal sería que cobráramos. Porque si tienes un trabajo que te exige mucho, lo normal es que no lo puedas combinar y lo tengas que dejar, como ha sucedido con Eduard Romeu, el vicepresidente económico”, decía el directivo cuando se le preguntaba por la marcha de otros compañeros de directiva.

Cubells lleva muchos años trabajando para el Barça. Lo hizo en una primera etapa, entre el 2003 y el 2010, y vuelve a hacerlo desde hace tres años. Su fe en Joan Laporta es ciega, pero en los próximos días podría recibir un tirón de orejas por parte de su presidente y amigo, pues para nada le han gustado a Laporta las palabras del secretario de la junta directiva.

Tiene claro el presidente del FC Barcelona que los directivos, cuando deciden aceptar la responsabilidad de formar parte del equipo de gobierno del club, deben hacerlo por compromiso con la entidad y sin ingresar un solo euro, como así se refleja en los Estatutos del club. Dice el punto tercero del artículo 32 lo siguiente: “La relación de los directivos con el Club es orgánica y no contractual, por lo que no podrá haber contraprestación económica”.

Y la actual junta directiva, que ha promovido una reforma de los Estatutos que debería ver la luz antes del final de mandato de Laporta no tiene previsto, para nada, modificar este aspecto. El mismo punto, por cierto, refleja que “los directivos no podrán estar vinculados al Club ni a la Fundación por un contrato laboral”, así que también queda claro que ningún directivo, por ejemplo, puede ejercer como CEO, como mínimo con un contrato de por medio. Algún propósito en este sentido había, pero la persona en cuestión debería haber dejado antes su cargo en la junta directiva.

Cubells, pues es cierto que los directivos dedican mucho tiempo al Barça, la solución, mientras el club azulgrana siga siendo propiedad de los socios, pasa por dotar al club de profesionales con talento en todos los cargos, especialmente en los de máxima responsabilidad. Es decir, que sean ellos los que trabajen y los directivos solo controlen y supervisen, que no haga falta que se pasen todo el día en las instalaciones del club como hacen algunos de ellos en la actualidad. Ese debe ser el modelo.

 

Facebook Comments