El reglamento de circulación de principios de 2021 trajo consigo importantes cambios, enfocándose en las distracciones al volante. La DGT ha endurecido las multas, sancionando con 200 euros y 6 puntos del carné el uso del móvil o de la pantalla de navegación mientras se conduce. Esta medida busca combatir la creciente ambigüedad y el descontrol generado por la proliferación de dispositivos que interfieren con la conducción.
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La superficie acristalada de los vehículos debe permitir una visibilidad diáfana, sin interferencias de dispositivos o soportes que obstruyan la visión del conductor. La utilización de estos elementos puede acarrear una multa de 200 euros, siendo desaconsejable tanto por razones de seguridad vial como por posibles sanciones.
Además, las distracciones no se limitan al uso del móvil, sino que abarcan actividades como comer, fumar, o atender a los acompañantes. Es importante prestar atención a las nuevas tecnologías integradas en los vehículos, como los sistemas de infoentretenimiento y los controles de voz, que pueden minimizar las distracciones al volante.
También se debe tener en cuenta el impacto del alcohol, las drogas y los medicamentos en la capacidad de conducción, siendo fundamental leer detenidamente los prospectos y consultar con un médico antes de ponerse al volante. En definitiva, mantener la atención en la carretera es crucial para garantizar la seguridad propia y la de los demás usuarios.
