Partido siempre complicado para el Real Madrid en El Sadar. Una plaza hostil, donde ha sufrido históricamente el club blanco. Aunque la estadística dijese que Osasuna no ganaba al equipo madridista desde 2011. En plena hora de la siesta, el santuario rojillo se ponía hasta la bandera para recibir al cuadro de Carlo Ancelotti.

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El técnico italiano, con la sensible baja de Bellingham y la de última hora de Joselu por un virus estomacal, disponía un once con Brahim Díaz de titular en la mediapunta. El jugador de origen marroquía había sido el gran protagonista de la semana por todo el lío con la RFEF y por haber escogido finalmente a los ‘Leones del Atlas’ como país para representar.

NACHO EN EL BANQUILLO

Atrás, sorprendía ‘Carletto’ alineando a Tchouaméni como central y dejando a Nacho Fernández en el banquillo. Y el encuentro empezaba loco. Error gravísimo e imperdonable de Catena atrás y Vinicius, en un mano a mano con Sergio Herrero anotaba el 0-1. Minuto 3. Lograba poco después rehacerse el equipo de Jagoba Arrasate. Fallo en un córner de Carvajal, que peinaba hacia atrás y aprovechaba Budimir para igualar (1-1) tras un rebote.

Pero una brillante asistencia de Valverde acababa con remate acrobático de Carvajal, que se redimía para el 1-2. Así se llegaba al descanso.

 

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