A mis correligionarios

Mi primera boina fue blanca y la usaba con mucho orgullo cuando todavía teníamos un gobierno militar. La llevé al acto del histórico Obelisco cuando Alfonsín cerró su discurso citando el Preámbulo. Durante toda mi vida electoral voté lista 3 hasta que se diluyera en otras alternativas, como la Alianza o Juntos por el Cambio. Por primera vez en octubre pasado voté a un candidato no respaldado por la UCR, y lo hice con convicción. En el asado familiar poselectoral fui el único de mi familia radical. En el balotaje fui a fiscalizar por ese candidato y lo votaron todos en mi familia. Desde entonces me sentía un náufrago en contra del partido que supo defender mis ideales, a tal punto que pensé en desafiliarme luego de 34 años. Por suerte, la semana pasada algunos gobernadores radicales y los presidentes de bloque me dieron esperanza. Algunos pocos dirigentes del partido saben interpretar la necesidad de estos tiempos. En 1890 la clase media inmigrante y revolucionaria necesitaba derechos laborales, sufragio universal, educación y salud públicas, entre otras cosas. Sin duda que la UCR fue un artífice fundamental para obtener esos derechos entonces y contribuyó en sus inicios a la grandeza de la Argentina de principios del siglo XX.

Hoy la realidad argentina le demanda otras banderas al partido de la clase media revolucionaria en busca de progreso. El despilfarro económico que ha generado la tercera hiperinflación sin guerra en la Argentina demanda una transformación profunda. Ese cambio radica en la reducción del gasto público para eliminar fuentes de corrupción e ineficiencia, desregulación y apertura económica para devolverle el poder al consumidor, estabilización monetaria para recuperar el crédito financiero que tanto necesita la población para acceder a bienes durables, y mejora en la calidad de los servicios públicos esenciales, como seguridad y salud.

Este cambio hoy lo lidera un representante de la clase media revolucionaria con ideas de libertad, y con honestidad y ética en el ejercicio de sus funciones. De haber nacido un siglo antes probablemente hubiera sido radical. La UCR no puede faltar como institución centenaria a la convocatoria histórica del 25 de Mayo.

Esteban Olivera

estebanolivera@gmail.com

La única manera

La diputada mendocina de La Libertad Avanza nos toma el pelo a todos con su proyecto de transparentar los salarios de los funcionarios. Todos los argentinos sabemos que la mayoría de ellos, de cualquier extracción política, cualquiera sea el área en la que se desempeñen, no se enriquecen con los salarios, sino con las elegantemente llamadas en la actualidad cajas de la política. Y hay que ser muy ingenuo para pensar que esa nefasta y enquistada práctica va a desaparecer con un decreto o una ley que nos muestre la remuneración mensual del director de área, del secretario, del ministro, etc. La única manera de erradicar o poner un freno a tanta corruptela es que la Justicia sea ejercida por jueces honestos y valientes, capaces de fallar diligentemente sobre quienes estén acusados probadamente de ser corruptos. De lo contrario, esto será siempre el cuento de la buena pipa y la lista de negociados, cada vez más larga y sin castigo .

Margarita Di Lella

DNI 11.663.308

Sugerencia

Señor presidente de la Nación: quisiera sugerirle que en su actuación tenga en cuenta el adagio latino suaviter in modo fortiter in re (suavemente en el modo, fuertemente en la cosa), que aplicado al caso podría interpretarse que su discurso no sea agresivo, aunque franco, y que a la vez usted sea inclaudicable en llevar a la práctica sus ideas esenciales.

Rodolfo Blaquier

blaquierrodolfo@gmail.com

Trilema de Alfonsín

Leí con atención la nota sobre el “trilema” de Alfonsín sobre la cuestión de los desarrollos nucleares y espaciales (vector Cóndor, etc.) heredados del gobierno militar precedente: técnico, político y ético. Concluye que decidió el camino de “fines pacíficos que prestigia a la política exterior argentina”. Al menos en lo relacionado con el Programa Cóndor, esto no parece ajustarse totalmente a la realidad. Hacia fines del 1970 la Argentina tenía un proyecto de lanzador satelital que fue reconvertido en un proyecto de misil balístico luego del desastre de las Malvinas (1982). Era un desarrollo tecnológico de avanzada con participación alemana y colaboración de Egipto e Irak. El vector Cóndor podía transportar un explosivo común o un artefacto nuclear. Estados Unidos logró descubrir ese proyecto y comenzó a presionar a la Argentina para pararlo. La presión fue aumentando, ya en el gobierno de Menem, hasta el punto de tener que suspender el proyecto, y ya hacia 1993 tuvieron que destruirse elementos, incluyendo la exportación de muchas partes a Estados Unidos (ARA Bahía San Blas), algunas vía España. Fue un proceso largo y complicado que incluyó fuertes discusiones en el Congreso (acusación a Alfonsín por vender tecnología a Irak y denuncias de traición a la patria por esa destrucción). Ver noticias de la época en la nacion y Clarín.

Nelson Sbarbati

nelsius05@gmail.com

Candidatos en EE.UU.

Es muy llamativo que en un país como EE.UU., con más de 300 millones de habitantes, los únicos candidatos posibles para las próximas elecciones sean personas mayores. Trump y Biden superan los 75 años y no parecen ser edades prudentes para el manejo de un país tan grande e importante en el mundo. Es raro que no surjan candidatos de 50/55 años entre tantos habitantes. Será que a nadie de esa edad le interesa la política y se dedican a actividades comerciales.

Horacio Mieres

DNI 8.608.530

Fórmula jubilatoria

Señores diputados, cuando traten la nueva fórmula jubilatoria, también deberían tratar el tope para jubilarse. Sean justos con quienes aportamos más de 30 años al sistema jubilatorio, en mi caso 40 años, y que podamos jubilarnos con el 82%. De lo contrario, que ese tope exista para todos: presidentes, diputados, judiciales, y tantas otras jubilaciones de privilegio. Por otro lado, no es justo que a quienes les faltan 5 años para cumplir los 30 años de aportes, con una moratoria de $4000, puedan jubilarse. Mis aportes de 5 años fueron mucho más que esos $4000. Así no hay sistema que resista y como siempre los perjudicados somos los que más aportamos.

Verónica Amitrano

veronicaamitrano7@gmail.com

En la Red Facebook

Calles inundadas en La Plata por el temporal

“¡Otra vez La Plata! Qué falta de obras por favor”- Nancy Arbulu

“¡Sigan votando peronismo!”- Fabián Delgado

“Es el cambio climático que el excelentísimo niega”- Oscar Rizzo

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