En las imágenes en clave baja predominan los tonos oscuros, los negros y las sombras. La clave baja no es simplemente una imagen subexpuesta; el entorno, la medición y exposición de la toma e incluso el revelado final son cruciales para esta técnica.
En la mayoría de los casos, es la escena o la luz la que pide una clave baja. Cuando la luz está controlada en un estudio sí se puede dirigir la luz para crear una predominancia de tonos oscuros y negros, pero en exteriores no siempre se puede llevar a cabo, por lo que hallar el momento, la luz o la escena adecuadas para este tipo de fotografía.
Normalmente, cuando los fondos son oscuros, la manera de llegar a una clave baja es subexponiendo la medición -1 o -2 puntos en la compensación de la exposición, así se forzarán las sombras para crear este efecto. Por ejemplo, cuando el sujeto está iluminado por una luz y el fondo es oscuro, al subexponer, resaltaremos aún más la luz del sujeto principal y el espectador se fijará únicamente en él, sin distracciones. Esto no siempre se puede conseguir, ya que el protagonista debe tener una luz puntual en él y el fondo tiene que tener una tendencia oscura. Si hay mucha luz en el fondo será complicado conseguir estos resultados.
Es una técnica en fotografía que, si la controla el fotógrafo, se pueden conseguir resultados muy creativos y diferentes. Forma una parte importante de la historia de lo que se quiere contar con la toma. No se consigue el mismo efecto si el fondo está en sombra que si tiene una luz de atardecer con colorido otoñal. Hay que mantener el equilibrio de las luces, que el negro sea negro, pero también que la luz esté correctamente expuesta sin perder información e incluso mantener los colores.
En edición se puede forzar aún más este efecto, pero es cuando se expone la fotografía el momento crucial para conseguir una clave baja. En la mayoría de las ocasiones aparece en imágenes con el blanco y negro con mucho contraste, pero manteniendo información en toda la imagen, menos en los tonos más oscuros, ya que el fondo suele ser totalmente negro, o en su mayoría.
Se utiliza mucho en retrato en blanco y negro, pero también es muy recurrente en fotografía de producto, alimentación y naturaleza en general. También en imágenes a color, donde se resalta la luz, el sujeto y los colores de la escena. Estas imágenes suelen ser muy minimalistas con el punto de atención en la luz de la escena.
TRUCOS
La exposición de la luz en el momento de realizar la fotografía es crucialSubexponer -1 o -2 puntos la medición dependiendo de la luz del entornoMantener equilibrio con la luz para que quede bien expuestaNo todas las imágenes pueden tener este efectoSe centrará la atención en el sujeto o luz principal
