Un oficial de policía hace guardia con una flor en el bolsillo mientras un grupo de personas se reúne para recordar a las víctimas del tiroteo que tuvo lugar a la entrada del centro comercial Field’s, en Copenhague, el pasado 3 de julio. La policía sostiene que el hombre armado que asesinó a tres personas e hirió a otra veintena cuando abrió fuego en el centro comercial abarrotado actuó solo y aparentemente seleccionando a sus víctimas al azar. Las autoridades también descartaron que el ataque estuviera relacionado con el terrorismo.

Facebook Comments