Muchas veces vemos como hay partidos de baloncesto que se ganan con una canasta en los últimos segundos o de esas sobre la bocina, pero en ocasiones es la defensa la que marca el punto y final de un choque, como sucedió en el partido entre el MoraBanc Andorra y el BAXI Manresa de la pasada jornada en la Liga ACB.
Chima Moneke llevó al extremo eso de que la defensa gana partidos y dio la victoria a los suyos a falta de diez segundos para el bocinazo final. Lo hizo gracias a un descomunal tapón que impidió que el conjunto andorrano se pusiera por delante en el marcador y dejó la última posesión en manos de su equipo.
Además, se dio la curiosidad de que el tapón de Moneke fue sobre Babatunde Olumuyiwa, que venía de ponerle un gorro anteriormente combinado junto a su compañero Oriol Paulí. Ya saben eso de que la venganza se sirve en plato frío, pues Moneke también.
