Los Juegos Olímpicos más esperados también están siendo los más atípicos de la historia por todos los estragos que ha provocado la pandemia del coronavirus, de la que el deporte no ha quedado exenta. Sin público en las gradas por primera vez, Tokio acoge un evento un tanto descafeinado pero lleno de emoción gracias a los competidores.
Hasta el próximo día 8 de agosto, los mejores deportistas del plantea se reunirán en la capital nipona, todos con el objetivo de llevar de vuelta a sus países un oro olímpico. No obstante, no habrá que quitarle la mirada de encima sobre todo a la delegación japonesa, que querrá hacer un papel especial en su propia casa y, de momento, están cumpliendo.
Por su parte, España llegaba con el objetivo de superar las 22 medallas de Barcelona 92, algo que parece ya inalcanzable y se quedará sobre la quincena, tras algunas decepciones, como la de los abanderados, Mireia Belmonte, sin medallas, y Saúl Craviotto, al que solo le queda el K4 para redimirse.
