El caso Robert Lewandowski es tabú en el Barça. Se le firmó como gran estrella del proyecto deportivo cuando nadie pensaba que el club blaugrana podía sacarlo del Bayern y se hizo un esfuerzo económico importante, sobre todo, a nivel de salario. Lewandowski llegaba como crack mundial inapelable de la mano de su agente, Pini Zahavi, que le hizo un auténtico favor a Laporta para que se marcase un golpe de mercado ilusionante. Y todos estaban convencidos de la operación: el Barça volvía a la primera línea mundial, Xavi tenía al mejor delantero del mundo y el futbolista cumplía el sueño de jugar la Liga española e iba a residir en Barcelona. El experimento debía funcionar y así fue en la primera temporada, dónde el polaco se convirtió en el máximo goleador del equipo y fue pieza clave para la consecución del campeonato.

Las cosas se han torcido algo en este segundo curso. Y eso que Lewandowski ha seguido demostrando que está a un nivel impresionante, pero en el Barça hay gente que no tienen tan clara su continuidad poniendo en la balanza el sueldo que deberá percibir y su peso en el equipo en el que será su tercer año de contrato. Hay debate. Y lo hay en la dirección deportiva y el cuerpo técnico a pesar de que nadie se atreve a hablar de este tema porque es muy delicado. Y lo es porque Lewandowski no tiene intención alguna de marcharse del Barça en este tercer año de contrato y, si se ve bien físicamente, incluso le gustaría cumplir el cuarto opcional, algo que sí será realmente complicado.

En las próximas semanas, tanto Xavi como Deco van a tener que tomar decisiones muy complicadas y podrían darse salidas muy dolorosas. Consideran que es necesario porque para avanzar hay que cambiar muchos cromos con el objetivo de poder rendir al máximo nivel en Europa. Con la actual plantilla no se ven capaces de competir, por lo que los jugadores intransferibles son muy pocos. Y Lewandowski, como mínimo a nivel interno, no lo es.

Otra cosa es si en el Barça se van a atrever a forzar la situación o si verdaderamente es una buena idea desprenderse de un delantero que asegura tantísimos goles por temporada a pesar de la edad que tiene. Es evidente que este equipo necesita más gol, pero el polaco lo da de una forma muy regular y en el mercado hay muy pocos rematadores que puedan competir con su efectividad. De hecho, salir al mercado a buscar un ‘9’ top para el Barça hoy en día es una auténtica quimera. Lo normal es que no pase nada y se respete el deseo de un jugador que aún le queda mucha cuerda, pero habrá que ver lo que sucede si finalmente llega un ofertón y se rema para que haya un desenlace en forma de traspaso. Por ahora, todo es tan delicado que nadie quiere decir nada. 

 

Facebook Comments