En la semana final de la campaña catalana el líder de Vox, Santiago Abascal, ha movido ficha enviando una carta abierta a Alberto Núñez Feijóo en la que le pide que los dos partidos refuercen sus relaciones en los gobiernos autonómicos, una coordinación política, parlamentaria, judicial y social “al golpe” del Gobierno de Pedro Sánchez y que el PP ponga fin a cualquier negociación con el PSOE, incluida la renovación del Consejo General del Poder Judicial, ahora mismo en un impasse a la espera de que se nombre un nuevo mediador europeo.
Abascal reprocha a Feijóo la “desastrosa campaña” de las elecciones generales de julio, que le pidiera a su partido que no se presentara a las gallegas de principios de año y que en las elecciones vascas tuviera como objetivo la desaparición del partido ultra. El líder de Vox deja entrever un hartazgo evidente en su misiva – “te he ofrecido de todas las maneras posibles la conformación de una estrategia común aparcando las diferencias, algunas irreconciliables que existen entre nuestras formaciones”, dice- pero asegura que “no hay tiempo para el orgullo” en un momento “de terrible gravedad”, asegura, porque Sánchez “supone una seria amenaza para España y las instituciones democráticas”.
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El líder de Vox critica también que “desde la dirección” del PP “se torpedean a menudo los acuerdos de gobierno”, casi tanto, dice Abascal, “como se dificultó que se llevaran a cabo tras las elecciones autonómicas de mayo. “Por el contrario, para nuestra sorpresa e indignación de muchos españoles, se mantiene la oferta permanente de diálogo con Sánchez”, dice la carta, para exigir después “un cese inmediato de negociaciones” con el presidente, en especial, dice la misiva, la que atiende al gobierno de los jueces, ahora tan atacados. Abascal pide también “revertir los acuerdos que ya se han alcanzado” previamente en parlamentos e instituciones.
Además, el líder de Vox insiste en que se produzca una “coordinación de las respuestas” a todos los niveles contra el Gobierno, desde parlamentarias hasta sociales (en clara alusión a las protestas en la calle que en los últimos meses ha capitalizado el PP), una “denuncia internacional continuada” del “proceso golpista”, incidiendo en que el PP europeo “debe romper la coalición con los socialistas” en Bruselas, y una “profundización de los acuerdos de gobierno” entre los dos partidos, poniendo “fin a todas las trabas” que se les pone desde Génova.
El líder de Vox aprovecha la carta para remarcar a las puertas de las elecciones catalanas y ante la precampaña europea las grandes diferencias con el PP: “Por ejemplo, respecto a la Agenda 2030, la regularización de inmigrantes ilegales o la libertad lingüística”, advierte Abascal, afirmando que en muchas regiones “hemos sabido llegar a puntos de acuerdo” y gracias a la aparición de Vox “se ha podido ver una alternativa”.
