Jon Rahm volvió a quedarse cerca de la victoria en el LIV Golf, el circuito multimillonario saudí que le firmó para dar espectáculo, y lo cierto es que el vasco aún no ha podido completar tres grandes jornadas de golf para llevarse la victoria.

En la prueba en Adelaida, donde más de 95.000 espectadores acudieron al torneo australiano, Rahm sólo ofreció su mejor versión en la jornada final, con una vuelta de 64 golpes (-8) pero demasiado tarde para ‘cazar’ al ganador, el estadounidense, Brandon Steele. El de Barrika acabó a solo dos impactos del campeón y a uno del sudafricano Louis Oosthuizen, que le precedieron en la clasificación.

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El español arrancaba demasiado lejos de cabeza y tuvo buenas ocasiones de birdie al inicio que no pudo aprovechar. Cuando se puso realmente en marcha, acabó con seis birdies y un Eagle, sin duda una explosión de juego del mejor Rahm, aunque llegó muy tarde.

Buena jornada final española

Mientras Rahm realizaba una última vueltas espectacular, también se sumaron al carro el castellonense Sergio García, que se fue a los 66 golpes (-6) sin aprovechar los pares cinco, para acabar en el puesto 40, empatado con su compañero, el barcelonés David Puig (-6).

En el torneo por equipos, los aficionados australianos, enfervorecidos, pudieron celebrar la victoria de los Rippers, comandados por Cameron Smith, al imponerse en el primera play-off de la historia en el torneo por equipos.

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Los aficionados celebraron la victoria del equipo australiano de los Rippers
EFE
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Jon Rahm no tendrá que esperar mucho tiempo para intentar buscar la primera victoria. Los equipos se trasladan a Singapur donde se juega a partir del viernes la séptima prueba del calendario en el Sentosa Golf Club, y donde Jon, tenaz donde los haya, seguro que intentará estrenar al fin su casillero de victorias en el LIV Golf.

 

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