El fútbol brasileño volvió a vivir un episodio, cuanto menos, surrealista. En el duelo entre Atlético Goianense y Flamengo, de la primera jornada del Brasileirao, el árbitro denunció mediante el acta que la mascota del equipo local le increpó al finalizar el partido y lo agredió verbalmente, lo que provocó que el colegiado decidiera expulsarlo.
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Una situación surrealista que aún coge tintes más lamentables con la reacción del propio Atlético Goianense. Lejos de mostrar su arrepentimiento por el comportamiento, el club decidió atacar directamente al árbitro del encuentro. A través de un comunicado en redes sociales, el Goianense atacó y de qué manera al árbitro, pero no hizo mención alguna a lo sucedido con la mascota.
Paulo Marcos, el hombre que estaba detrás de la careta de la mascota del Atlético Goianense, no dudó en decirle al juez: «Ladrón, hijo de puta…».
No es el único hecho lamentable que ha ocurrido en el fútbol brasileño y que ha tenido a una mascota como protagonista. En febrero del 2024 se disputó el clásico de Porto Alegre entre Inter y Gremio, y la mascota de los locales fue denunciada por una periodista brasilera. La periodista se encontró en la zona de suplentes cuando Sací, la mascota del Inter, la incomodó.
Después del partido, la periodista hizo la denuncia por acoso sexual y comentó públicamente lo que vivió en ese momento. Una vez que tomó conocimiento de lo sucedido, el club se puso a su disposición de inmediato.
