Un extraño ruido ensordecedor obligó a los vecinos del condado de Newberry, en Carolina del Sur, a optar por llamar a la oficina del Sheriff. Sin embargo, los sonidos no provenían de una pelea, una fiesta o una construcción, sino que eran emitidos por un tipo de cigarras particular llamadas “Geddon”, que aparecen en Estados Unidos aproximadamente cada 15 años.

“La gente debería salir y disfrutarlas”, dijeron los especialistas, que se mantienen a la espera de una gran invasión sin precedentes en más de dos siglos. Las cigarras Geddon comenzaron a hacerse notar en Carolina del Sur, pero no tuvieron una gran bienvenida por parte de los ciudadanos.

Según consignó Wis, el martes 23 de abril, decenas de personas se comunicaron con las autoridades e incluso se acercaron a agentes de seguridad para preguntarles sobre la procedencia de los ruidos molestos, que no son más que la señal de apareamiento que emiten estos insectos.

“Son demasiadas”: así se vive la invasión de cigarras en Carolina del Sur

La cuenta de TikTok @Brooksbrokenfemur mostró lo que viven los ciudadanos de Carolina del Sur. “Son demasiadas”, se le escucha decir en el video, donde se puede observar una gran cantidad de cigarras que llenan el paisaje. “En los árboles, en el poste, en el pasto”, continúa, mientras enfoca grandes superficies repletas de estos insectos. “Voy a caminar con cuidado para no pisar a estas pobres muchachas”, bromea antes de terminar la grabación.

El sheriff Lee Foster comentó que, “aunque para algunos el ruido resulta molesto, no suponen ningún peligro para los seres humanos ni para las mascotas”. Según describían en las llamadas telefónicas al 911, los ciudadanos vinculaban estos sonidos con una sirena, un gemido o un rugido.

Cicadas

Para Foster, el sonido fue “bíblico” y lo comparó con las langostas que se describen en las sagradas escrituras. El medio le consultó al respecto al Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), cuyos especialistas explicaron que “son más ruidosas que una sirena de policía y un poco más silenciosas que un motor de avión”.

“Tuvimos un año bisiesto, un eclipse, todas estas fases lunares diferentes y ahora tenemos cigarras por todas partes”, bromeó el sheriff Foster, quien aseguró que, hace algunos años, fueron visitados por este mismo tipo de insectos, pero que el ruido no era de menor magnitud. Se estima que el enjambre de cigarras permanezca entre dos y tres semanas en Carolina del Sur. Sin embargo, se espera que surjan en otros estados de ese país, como parte de una invasión que no se ve desde el siglo XIX.

¿El sonido de las cigarras puede traer problemas en la salud?

Durante 2021, en distintas partes de Estados Unidos aparecieron estas cigarras. El CDC explica que las crías de las cigarras pueden llegan a emitir niveles de ruido que oscilan entre 90 y 100 decibeles. Estos volúmenes están muy por encima de 85, que son la base del límite de exposición recomendado para el ruido. Pero no por eso se convierten en una amenaza para la salud.

Desde el Centro aseguran que el nivel de ruido por sí solo no es suficiente para proporcionar un contexto adecuado para provocar problemas de audición. “La duración de la exposición, la frecuencia con la que se repite y durante cuánto tiempo son fundamentales para comprender el riesgo”, detallan. Por ejemplo, se necesitan ocho horas seguidas de este sonido a 85 decibeles para que alguien sufra las consecuencias. Para los 100 decibeles, la cifra baja a una tolerancia de 15 minutos.

La distancia de exposición también influye, ya que generalmente las mediciones se realizan cerca de la fuente del ruido, con lo cual “pueden no reflejar el riesgo real para alguien ubicado más lejos”, señalaron. Por ejemplo, tomar los decibeles de las cigarras a un metro de distancia de un árbol muy infestado puede acercarse a los 100. Pero, a medida que uno se aleja, la intensidad disminuye proporcionalmente: son 94 a dos metros, 88 a cuatro metros, 82 decibeles a siete metros, etc.

 

Facebook Comments