Un eclipse solar ocurre cuando la Luna se interpone entre la Tierra y el Sol, y puede observarse de forma total o parcial.
El 8 de abril de 2024 se producirá un eclipse solar total en ciertos lugares del mundo, mientras que en España podrá verse parcialmente. Como ya se sabe, los rayos del Sol pueden ser dañinos para los ojos, siendo recomendable no mirar directamente al astro, ni a través de la cámara fotográfica ni con gafas oscuras habituales. Una opción es proyectar la imagen indirectamente para no mirar al Sol y no dañarnos la vista.
Además de proteger nuestros ojos, también es vital proteger nuestro equipo fotográfico, ya que no se puede dejar la cámara dirigida hacia el Sol pues se podría quemar el sensor. El objetivo tendrá que estar protegido con un filtro certificado específico de eclipse solar para proteger la cámara fotográfica.
En este caso utilizaremos una cámara réflex para poder elegir los parámetros a nuestra elección, pero es posible hacer este tipo de fotografías con otras cámaras fotográficas. Lo más aconsejable si queremos sacar una toma con el eclipse a encuadre completo o casi completo es utilizar una lente con bastante focal, por ejemplo un 500 mm o 600 mm, y posicionar el equipo fotográfico en un trípode que proporcione una estabilidad total.
A esto le sumamos un cable disparador y la activación del temporizador del disparo de la cámara en 2 o 10 segundos para no trepidar la imagen final.
En la composición también se puede incluir algún sujeto como una montaña o árboles, si estamos en un entorno natural, o edificios o alguna construcción si estamos en un entorno más urbano.
En este caso, lo más aconsejable es utilizar un diafragma cerrado como un f8 con una velocidad aproximada de 1/200, pero depende mucho de la luz que tengamos en ese preciso momento, por lo que ahí es cuando debemos valorar la velocidad ideal para que la medición sea correcta -ni sobrexponer ni subexponer la fotografía-, con un ISO 400 aproximadamente, ya que el uso de filtros solares protectores puede hacer que tengamos que modificar los parámetros de la exposición de la fotografía.
Nos tendremos que situar en la localización elegida con bastante tiempo de antelación para estar preparados, ya que este fenómeno puede durar solo unos pocos minutos, e ir haciendo tomas de todo el proceso a medida que va sucediendo el fenómeno y cuando va desapareciendo, de este modo tendremos un conjunto de imágenes que formaran un reportaje bastante interesante, siempre sin modificar el encuadre original de la primera toma.
Los eclipses son un momento ideal para sumar fotografías al archivo, pero siempre tomando las medidas de seguridad necesarias para los ojos y para el equipo fotográfico.
