La vicepresidenta Victoria Villarruel -hija de un excombatiente- se encontró con Javier Milei en el inicio del largo pasillo humano que habían conformado agentes de las Fuerzas Armadas en la Plaza San Martín de Retiro, lugar donde se hizo el acto central por el 42° aniversario de la guerra de Malvinas. Se dieron ahí el primer abrazo de una ceremonia en la que la número dos del Gobierno fue de las más emocionadas.

Vestida con un traje azul cortado a la cintura, un modelo que suele utilizar para eventos oficiales en distintos colores, con una cruz que se distinguía en su pecho y una escarapela, Villarruel caminó a la par del mandatario por esa pasarela. Atrás iba la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, que arribó con su hermano. A ella la vice la tildó de “brava” en otra oportunidad. Además, en la segunda hilera se mostraron el ministro de Defensa, Luis Petri, que tomó un rol protagónico en las ubicaciones; y el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri.

Les siguieron -mientras sonaba la banda de la Fanfarria Militar Alto Perú del Regimiento de Granaderos a Caballo General San Martín- otros funcionarios nacionales. Entre los presentes hubo dos de bajísimo perfil: el jefe de Gabinete, Nicolás Posse; y el ministro de Salud, Mario Russo, cuestionado en estos días por sus nulas apariciones públicas en medio del brote de dengue. También, por Diputados, llegó su titular, Martín Menem.

Lado a lado presidente y vice durante el Himno Nacional, a Villarruel se la vio sonreír en varios tramos de la entonación. Pero después se emocionó. Fue cuando los dos junto a Jorge Macri, Petri y Menem se acercaron al Cenotafio a los Caídos. Ya ahí, Milei le hizo señas a su vice y los dos máximos dirigentes del Gobierno acomodaron una ofrenda que habían dejado miembros de los Granaderos.

Tras eso, se fundieron en un segundo abrazo. Esta vez más sentido. En las imágenes de la cadena nacional, a Villarruel se la vio conmovida, haciendo esfuerzos para no llorar sobre todo en el momento en que volvió a tocar la Fanfarria, cuando estaban todavía frente al monumento a los caídos.

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Atenta escuchó el discurso de Macri. Y después el de Milei. “Viva la libertad carajo” y “viva la Patria” se oyó durante la alocución del jefe de Estado cuando nombró al expresidente Julio Argentino Roca y pidió “retomar su ejemplo”.

De fuertes nexos con la familia militar, la vice lo aplaudió cuando el mandatario dijo que las Fuerzas Armadas tendrían, en esta etapa, el respeto que -según Milei- les fue negado por otras administraciones. Cuando terminó sus palabras, los dos volvieron a abrazarse una vez más. La tercera. Ella cantó con entusiasmo la Marcha de las Malvinas. Completa. Él, solo una parte.

Los dos recibieron, cuando terminó, la carta de un hombre que se les acercó. Cuando se retiró, Villarruel lo hizo agarrada del brazo de Milei.

 

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