Al entrar en este departamento en un quinto piso, la vista se expande y sorprende con una perspectiva central al frente del Hipódromo de Palermo. Su afortunado dueño es Ariel Naso Arce, asesor de imagen en una productora audiovisual, que −nos cuenta− lo encontró bastante a las apuradas, urgido por el vencimiento de su último contrato de alquiler.

La ubicación y la iluminación lo tentaron; también, la posibilidad de crear contrastes entre el exterior clásico del edificio y un interior que explota de originalidad.

Sobre la base existente, jugué en cada espacio con una mezcla de nuevo y viejo, de colores, texturas y mucha vegetación. No quería un lugar que se pareciera a ningún otro

Ariel Naso Arce, asesor de imagen y dueño de casa

Desde el principio

Como puesta a punto, apenas tuvo que pulir el piso de madera y reemplazar el empapelado anticuado por pintura gris. Después, se ocupó de demostrar que es un gran descubridor de piezas vintage, y que sabe resignificarlas en situaciones contrastantes.

“Miro, imagino, busco lo que necesito y compongo”, comparte Ariel, que se encargó de la ambientación de todas las casas donde vivió y al que amigos y familiares siempre le piden consejos de interiorismo.

El verde conductor

“La luz y la orientación Este me atrajeron enseguida. Con sol hasta el mediodía, las plantas están felices, algo importantísimo: son el elemento que se repite en todos los ambientes”

Junto al living, apenas se traspone el umbral, Ariel armó una sala de TV que equipó con un sillón bajo y la pantalla bien camuflada. También le sacan la atención el brillo de los floreros, la butaca y los tres espejos avejentados. Con obras de arte en todas las paredes y, por supuesto, muchas plantas, le dio continuidad con respecto a los ambientes vecinos.

“Siento que este es un proyecto casi terminado. ¡Ya no entra nada! Le haré alguna cosita, pero funcional y estructuralmente, ya llegó a su punto definitivo, no creo que lo cambie más”.

Toques propios

“Tanto la cocina como el baño mantienen su estética y materiales de época. Y unos pocos detalles bastaron para alegrarlos”

Originalidad de época

El placard del dormitorio es francamente distinto: no solo hace zigzag, sino que, además, dibuja una trama original con el parquet y el cielo raso.

Usos múltiples

“El playroom fue el último espacio que terminé de armar, y el que más me sorprendió cómo quedó. Ahora es el ambiente que me resulta más cómodo, y el que más uso”

 

Facebook Comments