El pelaje de los zorros árticos (Vulpes lagopus) cambia con las estaciones; es marrón en verano, y blanco o gris en invierno, lo que les permite camuflarse mejor. No obstante, el fotógrafo Bret Charman se encontró en la Reserva Natural de Hornstrandir (Islandia) con este pequeño zorro, que no es capaz de transmutar. Así, su cuerpo conserva los colores estivales, a pesar de la llegada del frío.

Cuando Charman le retrató, el zorro andaba buscando alimento en medio de la ventisca. El zorro ártico es capaz de sobrevivir en tierras muy poco pobladas, donde se pueden alcanzar los -50ºC. Estos animales habitan en madrigueras y cuando vienen las nevadas, se refugian en túneles que cavan en la nieve.

Facebook Comments