La congelación de la bahía de Hudson es de vital importancia para que los osos polares cacen focas y crien a sus cachorros; así que estos animales esperan pacientemente a que esto ocurra. En consecuencia, este lugar se convierte en un punto de encuentro, con una enorme concentración de osos polares, donde se pueden realizar tomas realmente espectaculares de este magnifico animal en peligro de extinción.

Los datos de la toma son ISO 2500; f/5,6; 1/2700 seg; lente 500 mm; cámara formato completo; teleconvertidor 1.4x

Para la realización de esta fotografía utilizamos un objetivo de 500 mm y un teleconvertidor 1.4x para conseguir mayor focal, ya que los animales se encontraban a una cierta distancia. En cuanto al acercamiento, este se realiza en vehículos para mantener la distancia necesaria y no molestar ni intimidar a los sujetos.

Esta separación permite realizar fotografías impactantes del comportamiento natural de la especie, como esta lucha entre dos individuos. El ISO lo subimos a 2500 para tener una velocidad suficiente para no trepidar la imagen y el diafragma lo configuramos de 5, 6; una apertura suficiente para obtener un fondo desenfocado realmente atractivo a la vez que logramos la calidad de una lente fija.

Además, debes tener en cuenta que para captar este tipo de imágenes de fauna, como norma general, tendrás que desplazarte a lugares bastante extremos, también en lo que compete al clima. Es importante ir equipado para el frío y tener muy en cuenta la protección de las manos y de los pies. 

Existen unos guantes específicos para fotógrafos (con doble guante) que te permiten sacar un dedo para hacer la foto. Te recomendamos practicar antes de tu viaje y aprender a manejar el equipo con los guantes puestos. Así, seguirás siendo rápido en el momento crucial de la toma de fotografías y hábil con el manejo de la botonería. 

Al frío se le sumó en nuestro caso una densa niebla helada. Este fenómeno es resultado de la suspensión en el aire de multitud de partículas heladas y en consecuencia, se reduce la visibilidad y se complica conseguir el foco de manera correcta. Pero al contrario de echarnos para atrás, vimos este como un elemento valioso para el resultado final de la toma. 

Es una realidad que las cámaras más actuales consiguen el foco en el sujeto realmente rápido y de forma muy efectiva, pero si dispones de una cámara réflex más antigua, un truco será enfocar en un lugar que esté el mismo plano focal que los ojos de los osos y posteriormente bloquear el foco. Así, mantendremos a los sujetos enfocados a pesar de las partículas heladas o niebla helada.

Otro plus para la imagen es la centellada. La niebla se congela sobre la vegetación que les rodea, ofreciendo un entorno inigualable y que cuenta dónde habitan estos espectaculares animales durante estas fechas. Por último, a la hora de medir la luz, en la toma se sobrexpone +1 punto para compensar la exposición de la escena.

En la post producción de la imagen (siempre que se mida correctamente la luz en el momento de la toma) prácticamente no hay que tocar nada, simplemente corregir ligeramente el contraste y el brillo.

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