Se trata de una escena habitual para los aficionados a las artes marciales: un luchador propina a su contrincante un tremendo golpe en la cabeza provocándole un «knock out» o «K.O«.

Lo que este nocaut acaba de provocar a su rival, que ahora yace en la lona en estado de inconsciencia, no es otra cosa que, en la mayoría de los casos, un breve estado de coma. El golpe ha sido tan potente que, simplemente, el cerebro del luchador se ha desconectado momentáneamente.

Los científicos aún no tienen una explicación convincente de por qué se produce este fenómeno. Algunas teorías defienden que es posible que la sacudida del golpe afecte a la sustancia reticular ascendente, la parte de nuestro cerebro relacionada con el estado de vigilia. Otras, hablan de una crisis epiléptica a gran escala y en un corto espacio de tiempo, o de la pérdida momentánea de riego sanguíneo en el cerebro. 

Sin embargo, afortunadamente, en la mayoría de los casos, esta es tan solo una breve interacción relacionada con el estado de coma, uno de los fenómenos más desconcertantes abordados por neurólogos, neurocirujanos y otros estudiosos del cerebro; un terreno a veces resbaladizo pero del que te contamos todo lo que sabemos hasta el momento. 

¿Qué es el estado de coma? 

La palabra coma tiene su origen la voz griega «kôma», la cual significa «sueño profundo, y se trata de un estado temporal de pérdida de la consciencia en la que la persona que lo experimenta ha perdido la capacidad de responder a los estímulos sensoriales recibidos por el cerebro. 

El coma es, por tanto, según la décima Clasificación Internacional del enfermedades –CIE-10-, la lista oficial de enfermedades publicada por la Organización Mundial de la Salud, un síndrome en el cual una persona permanece viva pero es incapaz de moverse o responder a su entorno. 

¿Cuánto puede durar un coma? 

La duración de un estado de coma puede variar significativamente de una persona a otra. Depende de varios factores, entre los que pueden incluirse la causa del coma, la gravedad de la lesión cerebral subyacente y la respuesta individual del paciente.

Algunos estados de coma pueden ser de corta duración, mientras que otros pueden prolongarse durante semanas, meses e incluso años. Sin embargo, en los casos más habituales, el estado de coma se suele prolongar entre 2 y 4 semanas. Es en estos casos en los que existe una mayor capacidad de recuperación de los pacientes, la cual disminuye progresivamente con el tiempo que una persona permanece en estado comatoso. De hecho, los casos en que una persona sale de un coma después de varios años son extremadamente raros, y las secuelas irreversibles. 

¿Cuál es el periodo de tiempo más largo que una persona ha estado en coma?

El caso registrado más prolongado en el que una persona ha permanecido en estado de coma es el de una mujer estadounidense llamada Edwarda O’Bara, quien estuvo así durante 42 años tras contraer una neumonía en diciembre de 1969 y sufrir un shock diabético a la edad de 16 años. Fallecería a la edad de 59 años, en diciembre de 2012, sin haber despertado salvo en una ocasión en que su familia afirma haberla escuchado pronunciar un sencillo «hey», tras el cual la vieron sonreír. 

¿Cuáles son los síntomas de un coma? 

Aunque un estado de coma es intuitivamente identificable, los profesionales han establecido un conjunto de observaciones clínicas para determinar los síntomas comunes de este síndrome, entre los que se incluyen: incapacidad de comunicación; extremidades que no responden salvo a los movimiento reflejos; ojos cerrados; reflejos del tronco encefálico debilitados, como ausencia de respuesta a la luz en las pupilas; ausencia de respuesta a los estímulos dolorosos o respiración irregular. 

¿Qué puede causar un coma? 

Un coma es producto de lesiones estructurales del sistema nervioso central, tales como hemorragias, edemas, inflamaciones o tumores. Pero también puede ser consecuencia de un fallo metabólico o tóxico que afecte a algunas partes del tallo cerebral, del cual dependen el estado de alerta y vigilia. 

Así, entre las causas de un coma podemos encontrar algunos trastornos metabólicos como la hiperglucemia o hipoglucemia, el exceso de CO2 o deficiencia de O2 en sangre, insuficiencias renales o hepáticas y otros trastornos metabólicos u hormonales. También intoxicaciones, ya se trate de drogas (incluido el alcohol), medicamentos o venenos. Un coma puede ser producido del mismo modo por una potente reacción alérgica, una infección como la meningitis o la encefalitis o un fallo cerebro vascular. Sin embargo, la causa más común de un estado de coma son las lesiones traumáticas, generalmente producto de un golpe. 

¿Existen diferentes grados de coma?

Efectivamente, atendiendo a diversos criterios clínicos y al modo en que un paciente reacciona a los estímulos, los profesionales han establecido una clasificación en la que se establecen de 3 a 4 grados distintos de coma. 

Coma de primer grado o vigil: donde la pérdida de la conciencia es incompleta, el paciente reacciona a estímulos dolorosos y no hay trastornos vegetativos. Coma de segundo grado o de gravedad media: caracterizado por la pérdida total de la conciencia. Coma de tercer grado o carus: pérdida total de la conciencia y los reflejos. El paciente no reacciona a los estímulos sensoriales y está acompañado de varios trastornos vegetativos como presión arterial inestable o problemas de respiración. Coma de tercer grado o depassé: se produce una pérdida total de la conciencia, la motilidad, los reflejos, la sensibilidad y las funciones vegetativas. Corresponde a la muerte cerebral y se refleja en un electroencefalograma plano. Las funciones vitales han de mantenerse de forma artificial.

¿Qué es un coma inducido? 

El coma inducido, también conocido como coma farmacológico, es un coma en el que el estado de conciencia se ha visto alterado de forma controlada y clínicamente voluntaria mediante fármacos. En medicina se trata de una práctica frecuente en pacientes que presentan lesiones cerebrales o precisan de un profundo estado de reposo durante un tiempo considerable que está orientado a reducir su consumo de energía y oxígeno.

¿Cuál es la diferencia entre el estado de coma, la muerte cerebral, y el estado vegetativo? 

Como hemos visto, cuando una persona entra en estado de coma pierde la consciencia y la capacidad de reaccionar a los estímulos sensoriales. Un estado de muerte cerebral, sin embargo, se caracteriza por el cese completo e irreversible de todas las funciones cerebrales del paciente, y la imperante necesidad de mantener sus constantes vitales de forma artificial.

Este estado también suele confundirse con el estado vegetativo, en el que, aunque una persona pierde muchas de sus funciones cerebrales, conserva algunas de sus funciones esenciales, como el control de la respiración o de la actividad cardíaca. Clínicamente se considera que una persona entra en estado vegetativo cuando permanece en coma por un periodo de tiempo superior a las 5 semanas, y del cual es mucho más improbable salir. 

Facebook Comments