El fútbol francés vuelve a ser noticia por unas vergonzosas imágenes en el derbi entre Lens y Lille, disputado en la tarde del pasado sábado, cuando un grupo de ultras invadió el terreno de juego en el descanso en busca de atacar a la afición rival. Si ya en agosto seguidores del Niza hicieron lo propio para agredir a los del Marsella, los radicales vuelven a protagonizar una escena similar.
Durante el descanso, decenas de ultras del Lens saltaron al césped del estadio Felix Bollaert para dirigirse a la zona en la que se encontraba la afición visitante, desde la que se lanzó objetos desde las gradas. La situación llegó a tal punto que fue necesaria la intervención de medio centenar de antidisturbios.
Afortunadamente, todo ocurrió sin los futbolistas en un verde que se transformó durante un rato en un campo de batalla y no hubo que lamentar daños serios, más allá de un agente y un aficionado que resultaron heridos. En un principio, el partido fue suspendido, pero después de media hora de espera se pudo reanudar bajo mayores medidas de seguridad.
En lo deportivo, el Lens se llevó su primera victoria en 15 años en el derbi del norte y sigue la estela del París Saint-Germain. El gol en la segunda parte del polaco Frankowski le dio la victoria por la mínima a los locales. Década y media después de su última victoria frente a sus vecinos, el equipo dirigido por Franck Haise volvió a disfrutar de lo que significa sumar tres puntos en un derbi.
