Se acerca el último mes del año y desde el Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF) han aprovechado para dar unas pautas ante los cambios tributarios que se avecinan. Modificaciones fiscales como los tres anteproyectos presentados por la directora general de tributos del Ministerio de Hacienda, María José Garde, o la paralización de las reformas en impuestos ligados a la financiación autonómica y local (impuesto patrimonio).
Garde ha planteado estas propuestas sobre diferentes impuestos (transacción financiera, ciertos servicios digitales y medidas de prevención del fraude) para inaugurar las Jornadas Tributarias del Consejo General de Economistas. En este marco, el REAF (órgano fiscal de la corporación) ha planteado en rueda de prensa una batería de 75 recomendaciones con las que planificar debidamente el IRPF para el 2018.
Respecto al anteproyecto de Medidas de Prevención del Fraude presentado por Garde, desde REAF advierten del cambio en el criterio para valorar inmuebles del impuesto sobre patrimonio. Según ha explicado Jesús Sanmartín, director del REAF, habrá más “presión fiscal” si “aumenta el valor de mercado” (criterio añadido en el anteproyecto). Si los tipos impositivos “no bajan en las autonomías”, los contribuyentes tendrán que tributar más en aquellas en que se pague porque “todos los inmuebles subirán de valor”, ha desgranado.
Para Valentín Pich, presidente del Consejo General de Economistas, esta modificación “demuestra que somos monotemáticos” y le “sorprende” que se saquen ahora temas “tan delicados” como el del impuesto patrimonial. “Estamos retocando cosas de un sistema que no funciona”, ha criticado tras recordar que este es un impuesto que en la mayoría de países de nuestro entorno “no existe”.
Pich ha abogado por reformar el “enmarañado” sistema tributario que tenemos empezando por los “tributos cedidos a las autonomías y haciendas locales”. A los problemas ya palpables de los Actos Jurídicos Documentales (AJD) o la plusvalía municipal habrá que añadir los impuestos medioambientales, ha dicho. Todo ello genera, en suma, un sistema fiscal que no atrae inversión y “nos resta competitividad”, ha argumentado.
Los fiscalistas del REAF aportaron además una batería de medidas para planificar el IRFP, entre las que destacaron temas como la exención de las prestaciones por maternidad. Se habló también del plazo para rescatar, con descuentos, el plan de jubilación en forma de capital hasta final de año. Y los detalles a tener en cuenta ante divorcios, manutención empresarial, o la compensación entre pérdidas y ganancias.
No obstante, el mejor consejo es el que parece más simple. Ante la pregunta de cuál es el error más común, la analista de REAF lo ha visto claro: “Aceptar el borrador sin mirar nada”. Firmar sin comprobar que los datos son realmente tus ingresos, “como si lo hubiera hecho un inspector”, ha clarificado.
