La tecnología termosolar es la nueva apuesta por las energías renovables de Chile, que el pasado mes de junio inauguró su primera planta, también la primera en Latinoamérica.

El Cerro Dominador, nombre que recibió el proyecto de última tecnología, que es un paso más hacia un mundo verde, limpio y sustentable; consiste en una torre de 250 metros de altura instalada en medio del desierto de Atacama que utiliza 10.600 espejos enormes de 140 metros cuadrados sobre una superficie de 700 hectáreas.

Estos espejos desvían la luz hacia la cima de la torre que la capta con un receptor y cuyo calor producido se convierte en energía limpia y renovable de hasta 110 megavatios. Esta energía que se producirá ininterrumpidamente, incluso de noche, tendrá como resultado el ahorro de más de 600.000 toneladas de CO2 (dióxido de carbono) y podrá abastecer a 380 mil hogares.

Así como muchos países del mundo se están preocupando por el cambio climático, este proyecto es una plan de descontaminación y descarnobización para retirar todas las centrales a carbón antes del 2040 y reemplazarlas por las de energía limpia para el 2050.

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