El secretario adjunto de la Confederación Unitaria de Trabajadores de Honduras (CUTH), José Luis Baquedano, expresó hoy que seguimos abiertos y anuentes al diálogo a fin de encontrar un nuevo salario mínimo para este año.

La Comisión Negociadora del Salario Mínimo, integrada por delegados del gobierno, empresarios y obreros, no ha logrado desde diciembre un acuerdo sobre el nuevo aumento al salario mínimo que debe entrar en vigencia desde el uno de enero pasado en forma retroactiva.

El gobierno deberá tomar la decisión de aprobar un nuevo ajuste, en caso que los dos sectores no lo hagan, de acuerdo a la ley.

El presidente Juan Orlando Hernández, advirtió ayer que “si las cúpulas empresarial y obrera, no se ponen de acuerdo en el nuevo ajuste salarial yo lo decidiré y para ello he convocado a un grupo de economistas”.

En ese sentido, el dirigente obrero sostuvo que “estamos dispuestos a sentarnos con los empresarios para ver si existe la posibilidad o un espacio para acordar un nuevo ajuste salarial”.

Decisión

“No obstante, si la decisión la va a tomar el gobierno que sea dentro del marco jurídico, no torciendo la ley, porque ese ha sido uno de los problemas de este país la inseguridad jurídica en la que hemos estado viviendo”, puntualizó.

“La ley establece que se debe aplicar un reajuste salarial de acuerdo a los parámetros que ofrece el Banco Central de Honduras (BCH), uno de ellos es el IPC (Indice de Precios al Consumidor) que es del 4.01%; a eso hay que agregarle el Indice de Productividad (IP) que es del 1.58%, de manera que estaríamos hablando de un aumento al mínimo de 5.59%”, detalló.

Baquedano dijo que “esperamos que estas negociaciones sobre el salario mínimo no se conviertan en un tema político ni deseamos que sea utilizado como un caballito de batalla de algunos aspirantes a cargos de elección popular”.

“No es que nosotros hemos roto las pláticas con los empresarios, pero sí creemos que el proceso se agotó y ya no hay nada más que hacer. Han pasado más de tres meses y hasta hoy hemos conocido que quizás nos citen para esta semana o la próxima para cerrar las pláticas”, sostuvo.

“Cuando no hay acuerdo entre las partes, lo que se hace es que se convoca a las mismas, se levanta un acta en donde se especifica que no hubo acuerdo, ese documento se firma y después se traslada al Ejecutivo que es el que debe asumir la responsabilidad”, explicó.

“Pero, en esta próxima reunión los sectores tenemos que hacer un último esfuerzo para alcanzar un acuerdo, así como lo hemos hecho durante una década”, concluyó.

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