Juan Manuel Avila Meza en audiencia de sentencia en Nueva York dice: «Expreso mi arrepentimiento por mis actos. Siento pesar por mis actos en violación a la ley. Durante los últimos 5 años, he reflexionado y debo admitir mi responsabilidad.»
«He cambiado mi forma de pensar y actuar. Pido perdón por mi mala conducta a este Tribunal, al Gobieno, mi familia, por este daño. Estoy arrepentido y he decidido cambiar. Mi conducta afectó a muchos.»
«Yo me presenté a la DEA en Honduras. Asumo las consecuencia de mis actos e imploro tomo en cuenta mi entrega a la DEA al imponer mi sentencia. He hablado con sinceridad», dice el exoficial de la Policía.
«No he tenido visita de ningún familiar en 5 años. Ni esposa e hijos. He participado en programas de rehabilitación en MCC. Mi país sufre corrupción de mandatarios y políticos que afectan con el crimen y pobreza.»
«Vengo de una familia humilde y pobre. Ingresé a la policía para servir y con grandes esfuerzos me hice abogado. Mi esposa es abogada. Me sentí coaccionado por las esferas más altas del Gobierno Hondureño.»
«El testimonio de testigos hicieron condenar al hermano del Presidente. Pido perdón. Cambiaré mi conducta y no participaré más en este flagelo», dijo.
Agrega: «La vida de mis familiares corre peligro. Allá nadie sabe quién es quién. Los Cachiros hicieron temblar a varios políticos hondureños», dice el policía.
«Jueza, pido misericordia para darme sentencia. Pido considere todas las circunstancias en mi caso», dice Ávila Meza.
